La revista «Time» elige al creador de Facebook como el personaje del año 2010, y la noticia vuela en las redacciones, se comenta tertulias de radio y televisión y se multiplica en prensa a todo color. Algo debe de tener el libro de las caras cuando medio mundo planta la suya en un panel de corcho virtual patentado por un tal Mark Zuckerberg, un tipo con mucho rostro según afirman dos gemelos a los que el nuevo rico les habría robado la idea por la face.

La misma revista, aficionada a los números, acaba de publicar tras el referendo de Sudán un reportaje sobre diez territorios que aspiran a convertirse próximamente en naciones independientes. En su lista, tras Escocia, aparecen un tal Basque Country, el Tíbet, Kurdistán, Quebec o el Sahara Occidental. Y salvo dos medios digitales poco conocidos, ninguna otra redacción se ha hecho eco del artículo. Lo cierto es que, vista la superficialidad del reportaje, el interés de cualquier medio serio tendría que reflejarse en la misma medida. Pero vista la desmedida con la que esos mismos medios tratan noticias ininteresantes como la que se inventa «Time Magazine» con sus personajes del año, no podía esperarse menos de un listado que recoge las que, a juicio del semanario estadounidense, serán los diez próximos estados independientes del planeta. Un listado que incluye curiosidades como un utópico país de nombre Cascadia, que es adonde podríamos enviar a más de un dirigente político de este país, de esos cuyo mayor afán, además de dar lecciones de democracia por doquier, es dejarse ver en el muro de Facebook. Es tiempo de tirar muros. Es tiempo de cambios. Y lo saben. Y lo temen. Y lo evitan.