Su composición no responde a las aspiraciones de la mayoría de los tunecinos. Los miembros del RCD    están sobrerrepresentados. Algunos   eran muy cercanos al presidente y no deben mantener sus funciones. Esperábamos otras figuras políticas en un Gobierno de transición. No olvidemos que el partido sigue al frente del poder. ¿Cómo no ver en la composición del Gobierno una voluntad de conservarlo?

¿Los ministros próximos a Ben Ali a los que hace referencia son Ridha Grira, en Defensa, y Kael Morjane, en Exteriores?

 

No voy a citar nombres, pero puedo decirle que no me opongo a que algunos miembros del RCD sigan en el Gobierno provisional. El partido del derrocado presidente está presente en todos los ámbitos de la sociedad tunecina. Castigar a todos sus miembros debilitaría a la sociedad y podría provocar su hundimiento. Es lo que pasó en Irak cuando se excluyó sistemáticamente a los miembros del partido Baath, de Saddam Hussein. Yo apuesto por un modelo como el de Sudáfrica, con la puesta en marcha de un proceso de transición constitucional y una comisión de reconciliación. Ghannouchi parece privilegiar los intereses de su partido; justo cuando hay que lanzar un mensaje fuerte a la población y ofrecer garantías sobre el  buen desarrollo del proceso.

¿Critica la no representación de los partidos todavía ilegalizados?              

 

Por supuesto, aunque no me parece lo más importante. Estamos hablando de un Gobierno provisional encargado de los asuntos corrientes, de la redacción de la Constitución y de la organización de las próximas elecciones. Si el proceso corre el riesgo de no ser justo, es por la sobrerrepresentación del RCD. Además,  Ghannuochi no respeta los acuerdos. El secretario general de UGTT, Abdessalem Jrad, había acordado con él el anuncio del Gobierno el martes, tras la consulta interna. Ghannouchi se anticipó en 24 horas, pillando al sindicato a contrapié.

¿Cuál será la reacción de la población y de la oposición en los próximos días?

 

Se pueden esperar más protestas en las calles del país y nuevas renuncias. Pienso, sobre todo, en Mustapha ben Jaafar, presidente del Fórum Democrático para el Trabajo y la Libertad, nombrado ministro de Sanidad. Esperamos que el primer ministro proponga en los próximos días un Gobierno más respetuoso con las fuerzas políticas presentes y los compromisos democráticos. Jean-Sébastien MORA