«50.427 horas lectivas perdidas» en tres meses por ahorrar en sustituciones
Según ha calculado LAB, los alumnos de la red pública han perdido cerca de 50.500 horas lectivas como consecuencia de la nueva política de Lakua para la sustitución de personal docente, que en Secundaria deja las aulas sin profesor hasta cinco días seguidos.
Nerea GOTI
Con el inicio del nuevo curso, el pasado setiembre, en los centros de la red pública de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se puso en marcha una nueva norma para la sustitución de bajas y permisos del personal docente, merced a un acuerdo firmado por el Departamento de Educación con los sindicatos CCOO y UGT, en clara minoría sindical.
En aplicación de ese acuerdo, algunas sustituciones de personal se producen el primer día de baja, caso de Educación Infantil; a partir del tercer día en Primaria, para el profesorado de asignaturas como inglés y euskara, y a partir del cuarto día para el resto de puestos en la misma etapa; mientras, en Secundaria los alumnos tienen que esperar cinco días al profesor sustituto.
Transcurridos tres meses desde la entrada en vigor del nuevo acuerdo regulador de las condiciones laborales del personal funcionario docente, LAB Irakaskuntza ha hecho cuentas y calcula que con la nueva norma, que forma parte de los recortes «con el pretexto de la crisis», en las aulas de los centros públicos de la CAV se han perdido 50.427 horas lectivas a lo largo del primer trimestre de este curso.
El sindicato abertzale resalta que detrás de esa cifra hay una serie de realidades que pueden pasar desapercibidas para las familias. Resalta, por ejemplo, que en esos tres primeros meses, producto de esa nueva política para cubrir las bajas, 630 personas no han tenido la opción de trabajar haciendo sustituciones durante un mes.
En el aula o en el patio, pero sin clase
Además de la vertiente laboral y de la pérdida de horas de clase, la sección sindical de Educación de la central abertzale llama la atención sobre lo que ocurre dentro de los centros como consecuencia de la falta de profesorado, en algunos casos durante una semana, como en Educación Secundaria.
Según fuentes del mismo sindicato consultadas por GARA, en los centros hacen frente a la falta de personal «como pueden», o lo que es lo mismo, «aumentando la carga de trabajo» del personal docente al frente de las aulas -por ejemplo, incrementando el número de guardias- «pero lo que está claro es que profesoras y profesores sabemos que no ha habido normalidad académica el pasado trimestre».
Según destacan, en algunos centros la falta de personal ya ha generado «problemas graves». «No estamos hablando sólo de perder horas de clase -apostillan-, sino que en Primaria se dan casos de tener que unir dos aulas, del orden de cuarenta alumnos, y en Secundaria los alumnos permanecen en el patio por falta de personal».
Después de Navidades, peor
Esas situaciones se han dado «a menudo» durante el primer trimestre, según resaltan, pero a la vuelta de Navidades la situación se está agravando, entre otras cuestiones, por efecto del aumento de los casos de gripe.
El balance de LAB contrasta con la impresión que traslada el departamento que dirige Isabel Celaá. La central abertzale comenta que el Ejecutivo de Patxi López alardea de haber atajado la crisis y de haber hecho «lo mismo con menos» cuando, según denuncia, «esto es una gran mentira».
De hecho, los representantes sindicales de LAB sostienen que la situación es «tan grave» que Educación se ha visto obligada a modificar ya en dos ocasiones la normativa de sustituciones. El último cambio introducido por el departamento de Celaá contempla que, si el número de personas en situación de baja o permiso en un centro supera el 10% de la plantilla, la siguiente baja se cubriría de inmediato. A este respecto, la central abertzale plantea un caso práctico que explica la poca efectividad de la medida: en un centro de Secundaria con 60 personas trabajando, en el que los permisos o bajas no se cubren hasta pasados 5 días de la notificación, después de una semana sin 6 profesores, «los alumnos pierden 108 horas de clase, y eso no se soluciona tras la inmediata sustitución de la séptima persona de baja».
Lakua tiene noticia del descontento que ha producido su acuerdo de retrasar las sustituciones de personal docente desde que anunciara la medida con el beneplácito de CCOO y UGT. En los últimos meses, el departamento que dirige Isabel Celaá ha seguido recibiendo quejas de consejos escolares y asociaciones de madres y padres, preocupados porque «el retraso está teniendo un efecto negativo en las horas de clase del alumnado y en el trabajo del profesorado».
Los progenitores recuerdan que, si el profesorado del centro tiene que cubrir las bajas hasta que se sustituyan, están dejando de hacer otras tareas como coordinación, apoyo o refuerzo, y subrayan que en los centros de Secundaria «están seriamente preocupados por no disponer de medios suficientes».
Desde EHIGE, la entidad que reúne a las federaciones de asociaciones de padres y madres de la red pública de la CAV, informan de que están en contacto con las direcciones de los centros para recabar datos sobre la repercusión concreta que está teniendo esta medida en las aulas. N.G.