Las inspecciones de Trabajo de Bizkaia y Gipuzkoa han sancionado el «uso fraudulento de estudiantes-becarios en el Banco Guipuzcoano», según dio a conocer ayer LAB, que señaló que estas nuevas actas de infracción y liquidación confirman sus denuncias «sancionando una vez más» al Banco Guipuzcoano por «fraude con los estudiantes-becarios».

«Tras la utilización fraudulenta de los estudiantes por el Banco Guipuzcoano durante el pasado verano y las correspondientes intervenciones de los inspectores de trabajo, se ha comprobado la veracidad de nuestras denuncias y se ha procedido a sancionar y levantar las correspondientes actas de infracción y actas de liquidación por los 22 becarios», indicó el sindicato. La Inspección ha investigado la situación de 18 becarios en Gipuzkoa y de cuatro en Bizkaia. En su informe, reconoce que en todos ellos «se comprueba que el puesto de trabajo desempeñado por los becarios es de caja, que ese puesto se realiza por administrativos, que no tienen que tener formación universitaria», por lo que «no se puede afirmar que las tareas que desempeñan contribuyan a completar su formación educativa».

4.000 euros por trabajador

Asimismo, se recoge «que todos los becarios realizaban las mismas tareas que cualquier otro trabajador con funciones de cajero». Por todo ello ha iniciado un expediente sancionador por infracción grave graduado en grado máximo y ha propuesto una sanción de 4.000 euros por trabajador. LAB explicó que se aplica el criterio de agravación «fraude» por empleo irregular en su propio beneficio y al haber sido sancionada ya la empresa por los mismos hechos en ocasiones anteriores y por el perjuicio causado a los trabajadores en cuanto a sus derechos laborales, falta de cotización y retribución sustancialmente inferior a la fijada en convenio.

El sindicato denunció que, pese a las sanciones, el Banco Guipuzcoano «continúa haciendo fraude año tras año. Prefieren pagar las multas o recurrir las sanciones que cumplir la legalidad, contratar el personal necesario y pagarles lo que establece el convenio»

Finalmente, LAB exigió que, además de dar de alta en la Seguridad Social a estos becarios, se les abone el sueldo que les hubiera correspondido y se acuerde cómo se van a hacer las practicas de los estudiantes el próximo verano.