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Liga ACB Bilbao Basket cae en Valencia

Una linterna para poder alumbrar el camino hacia la canasta

La defensa taronja y las pérdidas de balón de los vizcainos, 19 en total, frenaron la racha de triunfos de los hombres de negro. Jackson y Banic fueron los únicos que destacaron en facetas ofensivas.

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VALENCIA BASKET 68

BIZKAIA BILBAO BASKET 54

Arnaitz GORRITI

Y la noche cayó sobre Valencia. Salvo el triple con el que Hervelle abría la cuenta del partido, 0-3, Bizkaia Bilbao Basket precisó de una linterna para encontrar la canasta de la Fonteta. Las pérdidas de balón -19 en total- y la defensa de los hombres de Svetislav Pesic ahogaron a los hombres de negro que vieron cómo se truncaba una racha de cuatro triunfos seguidos. Los de Katsikaris se mantuvieron cerca de los locales debido a que, a su vez, defendieron mejor que bien y que el equipo taronja no anduvo demasiado inspirado de cara al aro, pero tampoco tuvieron opciones reales de llevarse el partido. Una vez que el Valencia Basket abriera una brecha de 8 ó 10 puntos en el segundo cuarto, los hombres de negro se vieron incapaces de remontar.

Los únicos que rindieron a buen nivel en ataque fueron Aaron Jackson y, como siempre, Marko Banic, junto con esporádicas apariciones de Mavroeidis. Los demás, empezando por un Mumbrú muy errático -Claver le ganó en su particular mano a mano- y con Chris Warren desaparecido, prácticamente abdicaron de sumar en el aro rival. Con esos mimbres, y más ante un rival tan duro como el Valencia Basket, es muy complicado ganar. Por cierto, hay que empezar a preocuparse con la labor de Josh Fisher. Nadie duda de su esfuerzo y de su profesionalidad, pero desde que firmara el contrato hasta final de temporada, el hispano-estadounidense ha bajado su rendimiento en picado. Katsikaris insiste en ponerlo de titular y emplear a Jackson como «microondas», pero si Fisher no ofrece consistencia, la entrada de Jackson se convierte casi siempre en remar a contracorriente.

Una estela alargada

El duelo empezó a romperse en el segundo cuarto, después de que el Valencia Basket lograra abrir su ventaja hasta más allá de los diez puntos. Jugadores como el joven Marc Fernández o Augustine dieron un auténtico clínic en lo que a correr en transición se refiere. Si el partido no se rompió, pese al 38-25 con el que se llegó al descanso, fue porque Jackson anotaba lo suficiente como para tener a los taronja a tiro.

De hecho, los de Katsikaris se impusieron en el tercer cuarto, dejando la renta de su rival rozando la barrera de los diez puntos. Pero el dúo interior Lishchuk-Javtokas emergió en ese momento para, con unas acciones llenas de fuerza en el poste bajo -Sonseca estuvo desaparecido y Mavroeidis acabó asfixiado-, abrir la brecha a un 58-42 que resultaría una losa imposible de levantar.

Golpe en la travesía lejos de casa

El primero de los dos partidos seguidos que Bizkaia Bilbao Basket disputará fuera del Bilbao Arena mostró a las claras lo difícil que le va a resultar mantenerse entre los ocho primeros si no consigue fuera de casa la misma fortaleza que en Miribilla. Los hombres de Katsikaris perdieron el average respecto al cuadro taronja -triunfo con siete puntos de renta en Miribilla por una derrota por 14- y ofrecieron una imagen más que mejorable, sobre todo en el aspecto ofensivo.

La semana que viene la plantilla bilbaina culminará esta pequeña travesía lejos de casa ante un Real Madrid que sigue líder de la Liga ACB, a pesar de que tampoco ande muy sobrado. De hecho, los de Ettore Messina apenas si pudieron superar por la mínima, 61-62, a un Manresa voluntarioso pero poco más, que dejó una triste imagen hace una semana en la capital vizcaina.

Para ese partido, los hombres de negro deberán hacer bien los deberes en la defensa de Nikola Mirotic, el último descubrimiento madrileño. Los triples del ala-pívot hispano-montenegrino le evitaron ayer un morrocotudo disgusto al cuadro merengue. A. G.

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