El Colegio Oficial de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales de Bizkaia ha remitido a los medios un comunicado en el que, tras hacer un repaso a la polémica suscitada en torno a la Renta de Garantía de Ingresos y sus perceptores, pide «respeto a las personas usuarias del sistema de servicios sociales», así como a los profesionales que trabajan en este campo, y exige «precisión y veracidad» en la información que se transmite desde los medios.

En la nota se insta asimismo a llevar a cabo un mayor esfuerzo de coordinación y diálogo entre todas las administraciones, al objeto de establecer «un modelo de trabajo eficiente sin perjudicar a los colectivos más vulnerables».

Este colectivo afirma también, desde su larga experiencia de trabajo con las personas más necesitadas, que «no se puede tratar de realizar ajustes presupuestarios a costa de quien más está sufriendo las consecuencias de la crisis», del mismo modo que «no se puede paliar una sospecha de fraude con medidas repentinas, criminalizando a las personas que perciben la RGI u otras prestaciones sociales».

«No se pueden hacer declaraciones y manifestaciones interesadas, que creen confusión en la opinión pública y provoquen desconfianza entre la ciudadanía y rechazo hacia el colectivo de personas perceptoras de prestaciones sociales», sostienen quienes trabajan en este ámbito.

Precisamente, ayer se llevó a cabo en Bilbo una concentración para denunciar los recortes en las ayudas sociales.