La izquierda abertzale se concentra ante a la CAN para denunciar su privatización
La izquierda abertzale criticó ayer el proceso de privatización de Caja Navarra, integrada ahora en el Grupo Banca Cívica, y demandó por contra que la entidad financiera refuerce su carácter público y social.GARA | IRUÑEA
Varios representantes de la izquierda abertzale llevaron a cabo ayer una concentración frente a la sede principal de Caja Navarra en Iruñea para denunciar la privatización de la entidad financiera. Según afirmaron, «la actual reforma de la CAN y su conversión, junto con Caja Burgos, Caja Canarias y Cajasol en un Banco -Banca Cívica- supone acabar con la ausencia de ánimo de lucro que ha mantenido hasta hoy, su vocación social y la gestión público-social de la misma».
«De estar basada en la captación de ahorro popular y la financiación de necesidades familiares y pequeñas iniciativas empresariales, su conversión en un banco va a suponer suprimir todo lo anterior y pasar a depender del gran capital estatal e internacional», insistieron.
A juicio de la izquierda abertzale, «la «navarrísima» UPN y su Gobierno, así como el PSN, no han dudado a la hora de vender la CAN al mejor postor, sin importar que quien la controle a partir de ahora sea Madrid, New York, Londres o Frankfurt».
En la misma línea, censura que «mientras hacían todo esto, los altos cargos de la CAN se han puesto unos sueldos de escándalo, y su último presidente, Miguel Sanz, se ha asegurado cobrar durante toda su vida una retribución cercana a los 60.000 euros al año».
Frente a esta actuación, la izquierda abertzale propone mantener y reforzar el carácter público de la CAN; reforzar su carácter social; conformar, junto con las empresas públicas, un fuerte Sector Público navarro, reformar «a fondo» los estatutos de la CAN; reducir «drásticamente» los sueldos de sus altos cargos; y «abrirse» al resto de las cajas vascas.
Contrato de integración
Precisamente, ayer fue presentado para ser depositado en el Registro Mercantil de Madrid el texto refundido del contrato de integración para la constitución del Grupo Banca Cívica, que incorpora las modificaciones realizadas en el mismo el pasado 10 de diciembre por Caja Navarra, Cajasol, Caja Canarias, Caja de Burgos y la propia Banca Cívica. Así lo comunicaron las cuatro cajas y la propia Banca Cívica en sendos comunicados remitidos a la CNMV.
El jueves, la Junta General y el Consejo de Administración de Banca Cívica aprobaron los nuevos estatutos sociales de la entidad y nombraron a nuevos miembros de la alta dirección. Entre los nombramientos, según informó la agencia Efe, el más destacable es el de Antonio Pulido (que a su vez es Consejero Delegado del Grupo Empresarial), que fue nombrado copresidente de Banca Cívica y presidente del Consejo de Administración.
La entidad también anunció que Cajasol ha suscrito el aumento de capital de Banca Cívica, con lo que la estructura del capital queda formada por un 29,1%, por Caja Navarra; el mismo porcentaje que la entidad sevillana; el 21,3%, Caja Canarias y el 20,5 %, Caja Burgos.
Por otra parte, El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha suscrito una emisión de participaciones preferentes de Banca Cívica por un importe de 977 millones de euros, que fueron desembolsados ayer, según informó la entidad a la CNMV.
Al tiempo que critica la privatización de la CAN, la izquierda abertzale propone reforzar su carácter público, impulsando el sector cooperativo y social, la economía familiar, las iniciativas de los jóvenes y el apoyo a la pequeña empresa.
Asimismo, pide que la CAN se abra al resto de cajas vascas, al objeto de propiciar «un sistema financiero compartido que permita hacer frente mejor a la crisis y abra vías a una más armoniosa relación económica del conjunto de Euskal Herria».