Alcaldes independentistas guipuzcoanos solicitaron ayer una reunión al diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, para tratar el tema de la incineradora y su financiación. Los alcaldes se mostraron confiados en que el diputado general los reciba «en el plazo más breve posible». El primer edil de Usurbil, Xabier Mikel Errekondo, explicó a las puertas de la institución foral, en nombre de todos, que su intención es hacerle ver a la Diputación que «aplica de manera incorrecta» la directiva europea que marca la jerarquía de los sistemas de gestión de residuos. «La incineración debiera ser la última de las opciones, y la Diputación de Gipuzkoa se empeña en que sea la primera, se empeña en priorizarla», afirmó.

«Decisiones consensuadas»

En declaraciones a los periodistas, Errekondo denunció que los responsables forales están tomando decisiones respecto a la financiación de la futura incineradora de Zubieta «sin tomar en cuenta en absoluto los sujetos y los objetos de dicha decisión, que no somos otros que los propios ayuntamientos de toda Gipuzkoa». Por tanto, exigió que las decisiones que afecten a todo el herrialde sean «consensuadas» y «debatidas» entre los municipios, mancomunidades o consorcios. Junto con el alcalde de Usurbil, también acudieron a la Diputación, entre otros, Mikel Izagirre, alcalde de Urnieta; Aitor Etxeberria, de Oiartzun; Eneritz Maiz, de Ikaztegieta; Maixabel Arrieta, de Villabona; Arantza Aburuza, de Aduna; Pedro Lasagabaster, de Eskoriatza; Pedro Iturbe, de Antzuola; Aitor Sarasola, de Alegia, e Iñaki Errazkin, de Azpeitia.

Por otra parte, Errekondo consideró «legítima» la petición de elecciones anticipadas realizada por el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, que argumentó que la «fotografía de la representatividad debería ser entera» y apoyó la legalización de la izquierda abertzale.

«Por coherencia», el alcalde usurbildarra le pidió a Markel Olano que «haga la misma aplicación» en Gipuzkoa. Por ello, le solicitó que «mientras no se garantice esa situación, en la cual el espectro político sea el que debe ser teniendo en cuenta la legalización de la izquierda abertzale, no tome ninguna decisión de peso, como puede ser provocar que todos los municipios de Gipuzkoa tengan que soportar 21 años de esclavitud financiera con respecto al Banco Europeo de Inversiones, La Caixa y Banesto».

El coste del Centro de Gestión de Residuos de Zubieta, que incluye la polémica planta de incineración, está estimado en 382 millones. Para su financiación, el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa aportará 127 millones de euros, principalmente de los presupuestos de la Diputación, y el resto se sufragará vía créditos. El préstamo con La Caixa y Banesto asciende a 60 millones de euros, y los otros 195 millones se contratarán con el Banco Europeo de Inversiones.