El comité de la planta de Legutio de la multinacional belga Recticel Ibérica informó ayer de que la dirección pretende rescindir los 57 contratos de trabajo existentes en dicha planta, lo que supondría el cierre de la fábrica. Según el comité, la dirección ya intentó hace dos años, mediante un ERE de extinción, eliminar 39 de los 74 puestos de trabajo existentes en aquel momento. No obstante, la Autoridad Laboral no aprobó el ERE por considerar que las causas alegadas no fueron probadas. Ante dicha negativa, la empresa buscó despidos individualizados, según el comité.

Asimismo, el comité denunció «la continua agresión» que ha sufrido la plantilla de Legutio desde que dicha planta fue vendida, hace cinco años, a la multinacional belga.