«Presas» se resiste a ser enterrada. Aunque el grupo de teatro de la UPNA ya ensaya nuevas representaciones, el hecho de haber sido elegida para el festival internacional D'Hiver ha dado nuevos aires a la obra. Sin embargo, el director, Óscar Orzaiz, advierte de que quizá pronto se le dé carpetazo para arrancar con otros trabajos, por lo que la representación de hoy en Iturrama parece una de las últimas oportunidades para ver el espectáculo. A no ser que ganen.

«Presas» es una pieza coral, sin un protagonista claro, en la que participan catorce actores: ocho presas, dos monjas y cuatro personajes varones (cura, médico, abogado y maestro). El texto viene firmado por Verónica Fernández e Ignacio del Moral (guionista de «Los lunes al sol»). La obra nos lleva hasta una cárcel franquista de la posguerra en la que confluyen ocho presas con distintas historias vitales, aunque todas ellas muy duras (una prostituta, una mujer maltratada por su marido, una ladrona...). El presidio está gobernado por un cura que tiene a unas monjas ejerciendo como carceleras.

Óscar Orzaiz, director del grupo de teatro de la UPNA, explica que, pese a lo concreto del argumento, el tema central de la obra no es la posguerra, ni la represión franquista, sino, más bien, «la esclavitud a la que ha estado sometida la mujer y las distintas prisiones a las que ha sido relegada. En la obra hay mujeres presas físicamente, pero queda patente que el hábito de las monjas constituye también una cárcel. El tema político del franquismo se toca más bien de una forma transversal».

Diego Russelon interpreta al director de la prisión. «Mi papel es el del cura. En principio, hago de malo, aunque más que malo, soy frío. Me mantengo al margen de todo cuanto pasa a mi alrededor. En realidad, trato de llevarlo como puedo pero, al final, todo se me escapa un poco de las manos», dice el estudiante.

Tampoco desvela mucho del argumento Leire Sánchez, porque no quiere «reventar la obra». Sánchez interpreta a la presa recién llegada. Una mujer francesa que mató a un joyero cuando intentaba robarle.

Tanto para Russelon como para Sánchez, haber sido seleccionados para París ha constituido una gran sorpresa. Aunque, según confiesa el director, la idea de presentarse surgió de los propios actores. «Una cosa es viajar a Cáceres, y otra acabar en el festival de invierno de París. Porque París sigue siendo París», dice Russelon.

Estos dos alumnos se definen a sí mismos como «desertores», puesto que ya no estudian en la UPNA, sino que se han marchado a la UPV. Orzaiz explica que el grupo de teatro de la UPNA nunca ha estado cerrado a quienes tengan interés.

Un grupo de teatro diferente

Lo cierto es que la selección constituye un éxito para la UPNA. Es la única universidad que estará presente en el certamen que no proviene de la capital de un Estado (el resto se encuentran en Duala, París, Sarajevo y Belgrado). Además, todos estos grupos poseen facultades de Arte Dramático y los de Iruñea son los únicos actores que estudian otras materias.

Su actuación en París será el próximo día 1 de marzo. El primer problema logístico ha sido cómo trasladar el escenario, pero el más difícil de superar ha sido la barrera lingüística. Al final, Orzaiz cree que habrá traducción simultánea. El festival les ha pedido el libreto para traducirlo, pero la UPNA decidió encargarse de ese trabajo para no perder matices. No se sabe cómo se tomará la SGAE esta traducción. Por el momento, ya les ha reclamado 105 euros.