TRAS LAS ÚLTIMAS DENUNCIAS DE TORTURAS
ELA exige acabar con la impunidad y BF habla de violencia sexual amparada
GARA | DONOSTIA
Ninguna institución oficial tuvo nada que decir ayer ante la denuncia de Beatriz Etxebarria, trasladada a GARA por su abogado. Algunos agentes vascos sí se posicionaron al respecto. Así, Bilgune Feminista censuró ese silencio oficial y el sindicato ELA exigió el fin del régimen de incomunicación. Además, el consejero de Interior, Rodolfo Ares, sigue generando respuesta tras reprochar a partidos como Aralar y EA que cuestionaran las detenciones en el nuevo escenario.
ELA hizo pública una nota «ante las denuncias de malos tratos realizadas durante este fin de semana por los presuntos miembros de ETA detenidos». Reclama, «una vez más», que se acabe «definitivamente» con la práctica de la incomunicación, «en la medida en que se abren espacios de impunidad para que se vulneren sus derechos».
Por ello, ELA «exige también que se investiguen las denuncias de torturas y, en su caso, se depuren las responsabilidades». Lo mismo reclamó un día antes Ezker Batua.
Bilgune: «Dimensión mayor»
El relato de los detenidos ha motivado también una reflexión específica de Bilgune Feminista, que remarca que este tipo de violencia sexista tiene una «dimensión más grande» aún en los calabozos: «Porque el agresor es un grupo, porque se puede producir en un plazo de cinco días y porque es una violencia amparada por el Estado, es decir, porque los agresores son los que tendrían que preocuparse por la integridad física de las mujeres», explica.
«Además, la Ley Antiterrorista vigente en Euskal Herria, mediante el periodo de incomunicación, ampara estas situaciones -añade Bilgune Feminista (BF)-. ¿Qué dicen las instituciones políticas públicas ante estas torturas sexistas? Mantienen la boca cerrada para protegerse ellas mismas. Por tanto, queremos decir en voz alta una vez más que la tortura sexista, en el mundo o en Euskal Herria, es un reflejo directo de la esencia antidemocrática de gobiernos e instituciones».
Aralar contra Ares
En este contexto, sigue abierta la polémica iniciada por el consejero de Interior de Lakua, Rodolfo Ares, que arremetió contra partidos como EA y Aralar por criticar la persistencia de las detenciones.
La parlamentaria de Aralar Aintzane Ezenarro replicó ayer a Ares que ni él ni su partido «pueden dar ninguna lección en relación con los derechos humanos y el sufrimiento a Aralar, ni a nadie más». Argumentó que su partido «ha hecho un recorrido que el propio PSOE todavía no ha culminado», y puso como ejemplo que la pasada semana sus parlamentarios en Gasteiz fueron incapaces de criticar las afirmaciones de Felipe González «que legitimaban la violencia de Estado del GAL».
El domingo, Pello Urizar (EA) consideró que Ares «está muy molesto porque la nueva coyuntura le deja en situación muy mala», y añadió que «hay muchas cosas que poner encima de la mesa, no sólo las que le interesan a él».
Entrevistado en Info7 Irratia, el independentista Tasio Erkizia ironizó con el intento de usar esta redada contra Sortu: «¿Va a haber que aplaudir a la Guardia Civil y la tortura para ser legal?», preguntó.
Ezenarro (Aralar) dijo no entender cómo se rechaza la práctica de la incomunicación y se aplauden estas detenciones. Y Erkizia (izquierda abertzale) recordó que se condenan quemas de contenedores y se calla ante torturas.