Los representantes de ELA Janire Landaluze, del área de estudios, y Mikel Noval, responsable del área social, tildaron de «alarmantes» y «preocupantes» las consecuencias directas de la reforma de las pensiones, pactada por el Gobierno español, CCOO, UGT y las patronales CEOE y Cepyme, en relación a los datos «escasos» que aparecen reflejados en la Memoria Económica que acompaña al Anteproyecto de Ley Sobre Actualización, Adecuación y Modernización del Sistema de Seguridad Social.

Según el estudio pormenorizado de ELA, cada año el sistema público de pensiones perderá 37.000 millones para hacer frente a la nómina de los jubilados y, por otro lado, el Gobierno español ha logrado introducir un mecanismo automático para que en 2027, cuando se revise la esperanza de vida, se eleve la edad de jubilación a los 69 años.

ELA considera que CCOO y UGT «han cedido» a las pretensiones del Gobierno español y recordó que en los demás países europeos los sindicatos son los que se están oponiendo a los recortes en las pensiones, mientras en el Estado español «CCOO y UGT han aceptado las medidas antisociales de José Luis Rodríguez Zapatero». En este sentido, el responsable de políticas sociales de ELA citó al ex mandatario europeo Jacques Delors que denunció hace unas semanas que el pacto de competitividad que maneja la UE es «el documento más conservador de la historia de la Unión Europea». «Ese pacto -dijo al respecto Mikel Noval- es similar al que se ha aprobado ya en el Estado español, que en este momento es punta de lanza del neoliberalismo en Europa».

Eso quiere decir, como explicó Noval, que «se producirá un recorte enorme del gasto destinado a las pensiones. Se ha calculado en un 3,5% del PIB en 2050, lo que con datos de hoy, supone que cada año se van a quitar del bolsillo de los pensionistas, al menos, 37.000 millones». Destacó que esa cantidad es un 40% de la nómina de las pensiones, por lo que denunció que esa reducción es «un atraco a los pensionistas».

Landaluze explicó que serán las mujeres las peor paradas de esta reforma. Recordó asimismo que el propio Ministerio español de Economía y Hacienda indica que «actualmente alrededor del 50% de quienes se jubilan tienen 38,5 años cotizados», pero ese mismo informe precisa que «los cambios socioeconómicos hacen esperar que en el futuro ese porcentaje descienda». Para la representante de ELA «es alarmante y preocupante» que el Gobierno español esté descontando ya «las consecuencias del aumento de la precariedad, del desempleo y la extensión del empleo parcial».

En este sentido, Landaluze explicó que «es imposible llegar a esas edades de cotización, y seremos las mujeres las peor paradas, porque condena a casi todas las mujeres a jubilarse a los 67 años y con una pensión muy baja debido a todos estos condicionantes que se imponen en la reforma».