Los bancos de alimentos advierten del «alarmante» aumento de necesitados
La crisis económica castiga a los sectores más desprotegidos de la sociedad vasca, lo que ha obligado a los bancos de alimentos de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa a impulsar una campaña de recogida de comestibles del 31 de marzo al 2 de abril para tratar de satisfacer el «alarmante incremento de personas necesitadas». Estas entidades sin ánimo de lucro advirtieron ayer de que la demanda ha aumentado «en un 50%».
Agustín GOIKOETXEA
Los bancos de alimentos vascos llevan tiempo advirtiendo a la sociedad de que, tal y como lo describió hace unos meses el presidente del de Nafarroa, Carlos Almagro, a GARA, «el almacén se nos vacía con mucha más frecuencia que antes de la crisis». Ayer, en Bilbo, Nicolás Palacios, responsable de la entidad benéfica en Bizkaia, se reafirmaba en esa tesis cada vez más extendida, subrayando que cada vez son más las personas necesitadas que llaman a sus puertas en busca de comida que llevar a su boca y a la de sus familias.
Ha sido «el alarmante incremento de necesidad» el que ha llevado a los bancos de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, por primera vez en su historia, a promover una gran campaña de recogida de alimentos en la CAV, tomando como ejemplo una exitosa experiencia en Barcelona.
Palacios confesó que los medios habituales de acopio de alimentos -donaciones de industrias alimentarias y empresas de distribución, excedentes de campañas agrícolas y mercados de abastos, campañas puntuales de recogida y aportaciones del Fondo Español de Garantía Agraria- no son suficientes para atender la creciente demanda. «Nos estamos quedando cortos. No tenemos más remedio que implementar nuevos métodos de recolección», señaló el responsable de la entidad que en 2010 repartió 2.550 toneladas de víveres tan sólo entre instituciones sociales vizcainas.
En el conjunto de la CAV, los bancos distribuyeron 4.400 toneladas de alimentos entre algo más de 47.000 personas; en Nafarroa, fueron unas 881 toneladas para cerca de 32.000 beneficiarios. «Estas personas requieren de nuestra solidaridad y capacidad organizativa para no llegar a convertirse en personas marginadas», manifestaron ayer en la presentación de la iniciativa, que es apoyada por BBK, diferentes empresas y medios de comunicación, entre ellos GARA.
La gran recogida de alimentos será del 31 al 2 de abril en 150 supermercados de Alcampo, BM, Carrefour, Ercoreca, Lidl, Simply, Eroski, El Corte Inglés y Uvesco. Allí, bajo la supervisión de voluntarios, los ciudadanos podrán hacer donaciones de alimentos básicos de larga duración -como arroz, pasta, legumbres, leche y aceite- en unos grandes contenedores.
Objetivo, 100 toneladas
El objetivo que se han fijado los responsables de los bancos es conseguir 100 toneladas de comestibles, con las que «atender la demanda actual de personas necesitadas». Pero no será la única meta de la campaña, con la que también se pretende «sensibilizar y movilizar a la población» sobre la realidad de esa necesidad en nuestro entorno y, a la vez, favorecer una colaboración continuada con estas entidades sin ánimo de lucro durante todo el año.
Insisten en que la gran recogida «va a permitir mejorar la vida diaria de millares de personas de aquí que lo están pasando mal». «No se pide dinero, se piden alimentos y este dato es escalofriante», declaró Yolanda Alzola, presentadora de televisión que junto al comentarista de pelota Joxetxo Lizartza, los pelotaris Oinatz Bengoetxea y Aimar Olaizola, el también presentador Kristian Pielhoff, y los cocineros Karlos y Eva Argiñano participan en un spot promocional de la campaña, los mismos que aparecen en un cartel que identificará a los establecimientos participantes.
«Es un pequeño gesto, que no cuesta mucho y hace una gran labor», precisó Alzola, mensaje corroborado por Lizartza, que consideró «un honor» poder haber colaborado en una iniciativa solidaria con los más pobres.
Un pabellón de 200 metros cuadrados en el polígono de San Juan, en Bergara, se convertirá en las próximas semanas en la segunda sede del Banco de Alimentos de Gipuzkoa (BAG), que dará servicio principalmente al área de influencia de Debagoiena y Urola. En el transcurso de un acto protocolario celebrado durante la tarde de ayer, responsables forales y de la entidad rubricaron un convenio de colaboración por el que la Diputación destina 106.200 euros para financiar el nuevo depósito y dotarlo de cámaras frigoríficas, estanterías y una furgoneta de reparto.
El presidente del banco, Juan Mari Garitano, señaló que la nueva infraestructura -que se suma al almacén de Oiartzun- pretende «ayudar a unas 8.500 personas en situación precaria o en riesgo de exclusión social en toda la zona de Deba y del Urola» y que cuentan para esta labor con unos 60 voluntarios. Informó de que el pasado año el centro de Oiartzun atendió, por medio de 166 entidades sociales, a más de 16.000 personas, de las cuales 2.500 residen en la zona de influencia de la nueva sede. En 2010, el BAG distribuyó algo más de 956 toneladas de comestibles. A.G.