Las cuentas salen casi solas para Bizkaia Bilbao Basket. En el contexto de una segunda vuelta plagada de partidos lejos de Miribilla -con salidas pendientes tan peliagudas como las de Zurbano o el Palau Blaugrana-, el objetivo de terminar la liga regular entre los ocho primeros pasa, ante todo, por asegurar la victoria en los partidos que se disputen en el Bilbao Arena.

En principio, la visita del Granada representa una ocasión pintiparada en la idea de sumar la decimosexta victoria y empatar con el Caja Laboral Baskonia en la cuarta posición. El cuadro nazarí ocupa la penúltima plaza, con sólo cinco victorias tras 26 jornadas. Las lesiones de Mario Fernández -que no ha debutado en lo que va de liga-, Robert Kurz y Yaroslav Korolev y la venta de Joe Ingles al Barcelona, han castrado el juego de los de Curro Segura -que tampoco ha ejercido de revulsivo desde que sustituyó a Trifón Poch-. Por si fuera poco, las deudas también ahogan al conjunto andaluz.

En resumen, Bilbao Basket tiene ante sí un rival al que ha de ganar sí o sí. De lo contrario, podría caer hasta la novena plaza -si es que Unicaja, Gran Canaria y Fuenlabrada ganan- y sentir en su cogote el aliento de Estudiantes, Joventut y Cajasol.

Tiempo de reaccionar

Con todo, las dos últimas derrotas ante Unicaja y Gran Canaria, y el recuerdo de cuán apretado resultó el triunfo en el último partido jugado en Miribilla -el derbi ante Lagun Aro GBC, con el triple salvador de Aaron Jackson sobre la bocina-, hacen que Fotis Katsikaris no se fíe. El técnico heleno apelaba al «carácter» demostrado por los suyos en el último partido liguero, al mismo tiempo que recordaba que «es tiempo de reaccionar».

«Podíamos acabar mejor el `tour' de tres partidos fuera, pero hay que seguir -subraya-. El equipo es consciente de la importancia del partido y de que no podemos fallar. Este equipo está demostrando que tiene carácter, es competitivo y tras dos derrotas seguidas, ha llegado el momento para reaccionar», aseguró contundente0 Katsikaris.

El técnico heleno prefirió pasar página a la derrota tras una doble prórroga en la cancha del Gran Canaria, y quiso centrar su mirada en el choque de esta tarde. Según declaró, el Granada llega a Miribilla «en una situación muy complicada, pero lucha todos los partidos y busca las opciones que tiene para salvarse. Les han pasado muchas cosas y han perdido a uno de los mejores pívots de la liga y a otra clara referencia», dijo, en alusión a Kurz e Ingles.

«Granada sigue siendo un equipo competitivo pero es cierto que ahora las referencias son los exteriores: Gianella, Stefansson y Coby Karl. Si hacemos un buen trabajo contra los tres no digo que ganaremos fácil, pero sí que ellos son sus pilares», comentó el entrenador bilbaino.

Eduardo Hernández-Sonseca, que disputará su partido 300 en la ACB, opinaba de una manera muy similar. El pívot madrileño optaba por «sacar ante el Granada lo positivo del partido ante Gran Canaria para que recobremos la dinámica de victorias».

«Ante el Granada tenemos más que perder que para ganar», confesaba Hernández-Sonseca, «ya que Unicaja y Gran Canaria se nos echarían encima. Lo que debemos hacer es confiar en nuestro juego y confiar en nosotros mismos».