Los Mclaren-Mercedes, en su nueva versión no tan radical como la que rodó en los entrenamientos invernales, consiguieron los mejores tiempos en la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Australia en Melbourne.

McLaren traía a este primer Gran Premio de la temporada unos escapes más tradicionales y un nuevo fondo plano, que no habían probado, lo cual era un riesgo, y que pensaban que podían ganar un segundo.

Las novedades dieron resultado y por la tarde los Button y Hamilton fueron los mas rápidos, aunque su ventaja sobre Alonso no ha sido muy grande, 147 milésimas a favor del primero y tan solo 15 a favor del segundo. Fernando Alonso (Ferrari) fue tercero en la dos sesiones de pruebas. Si en la segunda era superado por los McLaren, en la primera eran los Red-Bull del local Mark Webber y del alemán Sebastian Vettel los que terminaban por delante.

Apretado

La igualdad en esta primera sesión fue notable, porque el cuarto clasificado, el alemán Sebastian Vettell, se quedó a 160 milésimas y eso hace prever una sesión de clasificación extraordinariamente competida.

Por la mañana Jaime Alguersuari tuvo que dejar su volante al piloto reserva de Toro Rosso, el australiano Daniel Ricciardo, y por la tarde salía a la segunda sesión, complicada con la aparición esporádica de la lluvia, pero al final lograba un buen tiempo, el undécimo, a un segundo y seis décimas del mas rápido Button, y superaba claramente a su compañero de equipo, Sebastián Buemi, decimocuarto, por dos décimas de segundo.

De los pilotos debutantes sorprendió el mexicano Sergio Pérez (Sauber), autor del octavo mejor tiempo y que se quedó a un segundo y dos décimas de segundo de Button y superado a su compañero, el japonés Kamui Kobayashi, en un segundo.

Hispania logró finalmente poner en pista un coche, el del italiano Vitantonio Liuzzi, que salió cuando apenas faltaban dos minutos para finalizar las pruebas y sólo pudo dar una vuelta para comprobar que todo funcionaba correctamente en el F111. Hoy continúa