El Parejas de este año parece una prenda de esas de antaño, que no termina de romperse y que hará su uso hasta el último día, ya que seguimos sin conocer la identidad de ninguno de los finalistas y, lo que es aún más sorprendente, las cuatro parejas tienen intactas sus opciones, si bien es cierto que Xala-Barriola son el binomio que más cerca tienen el objetivo. Como en todo el campeonato, el delantero de Lekuine, el pelotari más brillante de lo que llevamos de torneo, estuvo muy cerca de abrir un agujero sin arreglo en la tabla con el 15-5, pero el joven remendón Merino II se encargó de zurcirlo para seguir operativos hasta la batalla final.

A pesar de los vaivenes en el marcador y de la gran remontada colorada con diez tantos consecutivos, Xala-Barriola fueron superiores en todo momento y se confirmaron como la pareja más solvente. Esencialmente, porque Xala pasa por ser, hoy por hoy, el mejor especialista en activo del Parejas y, cuando al de Lekuine la pelota le sale de la mano con ese brillo tan especial, poco hay que hacer. Además, sus espaldas están cubiertas por todo un seguro de vida como Abel Barriola que, sobre todo en la parte inicial del partido, se mostró mucho más fresco que la pasada semana.

Los vaivenes de Irujo

Por contra, Juan Martínez de Irujo sigue muy lejos de su mejor momento y de una línea constante de juego. El de Ibero tuvo momentos brillantes, pero no la continuidad suficiente para hacer frente a una pareja que perdió su primera pelota en el 4-13, tras 346 pelotazos. El campeón manomanista está desencanchado y le falta confianza, lo que le llevó a abusar de la dejada en algunas fases.

En esta tesitura, el peso de la pareja, que por nombre y status le corresponde a Irujo, cayó a espaldas de Merino II y el de Villar de Torre volvió a asumirlo con insultante naturalidad, dejando destellos de gran clase.

Así, consiguió que Irujo despertara a la bestia tras un error de aire, mandando la pelota al colchón de abajo, en el tanto que supuso el 5-15. El de Ibero lanzó la pelota contra el frontis como si de una piedra se tratara, casi arrancó una publicidad de la pared y se conectó para conseguir empatar el partido con un parcial demoledor de 10-0.

Con una pelota mucho más ligera, que incluso le hizo un par de extraños a Barriola en el saque, los colorados mandaron sobre la cancha y Merino cerró la segunda igualada del partido en el cartón 15 con un magnífico pelotazo que fue a morir a pared izquierda, pese al intento de Barriola por evitarlo.

Sin embargo, los colorados entraron a vestuarios en ese instante y el parón propiciado por los azules atascó a los colorados. Con el cansancio acumulado haciendo mella en los zagueros, Xala retomó el mando y se las ingenió para lograr una victoria que lo pone a las puertas de su cuarta final de este campeonato, que sería la primera de Barriola.