Koldo CAMPOS Escritor
Para crecer
Difícilmente en la memoria de las urnas, que hablar de la historia de la democracia me sigue provocando legítimas aprensiones, va a existir un voto con tanta significación y aplicaciones como el que respaldará a la izquierda abertzale en las próximas elecciones de mayo.
La izquierda abertzale, que sí va a estar en las elecciones y más arropada que nunca, va a obtener los votos de quienes respaldamos su propuesta y confiamos en la idoneidad de las personas elegidas para llevar a cabo su programa.
Por encima de cualquier tribunal supremo que se arrogue la facultad que no tiene de negarnos el derecho universal al voto, la izquierda abertzale también se va a llevar el respaldo de quienes, con nuestros votos, pongamos en evidencia el fraudulento carácter de la ley electoral.
E igualmente, la izquierda abertzale arrastrará los votos de quienes en el uso de ese ejercicio democrático, denunciemos la dolosa complicidad de partidos políticos que, amparados en el fraude, persisten en su empeño de mantener la representatividad de la que carecen.
Al margen del peso y la trascendencia que tenga la candidatura abertzale porque así lo disponga la voluntad popular, único tribunal que en una democracia tiene autoridad para avalar o rechazar el acceso a las instituciones, si el voto, se supone, sólo es válido para elegir, en las próximas elecciones el respaldo a la izquierda abertzale, además de para elegir la mejor propuesta, también va a servir para denunciar a los embaucadores, para desenmascarar a los farsantes, para desalojar a los fulleros y, sobre todo... para crecer.