A escasas horas de que comenzara hoy el juicio más esperado contra Silvio Berlusconi ¯el llamado «caso Ruby»¯, el primer ministro de Italia ganó ayer un primer «round» a los tribunales, al plantear la Cámara de los Diputados un conflicto de competencias entre diferentes juzgados. Por doce votos de diferencia, la Cámara Baja italiana aprobó por iniciativa del partido del mismo Berlusconi, Pueblo de la Libertad, plantear al Tribunal Constitucional qué tribunal es competente para juzgar al primer ministro por prostitución de menores y abuso de poder: si bien el Tribunal de Milán, donde se prevé que comience hoy el juicio, o el Tribunal de Ministros, donde el primer ministro tiene más apoyo por parte de los jueces.

La mayoría gubernamental considera, al igual que lo han defendido durante meses los abogados del primer ministro, que es ese último donde debe de ser juzgado, dado que el delito de abuso de poder es competencia de esta corte; hecho que niega la oposición, que ha calificado la decisión de «otra página vergonzosa» en la historia del Gobierno de Berlusconi, y ha acusado al primer ministro de haber comprado varios votos para asegurarse la mayoría en el Parlamento. El portavoz del partido Futuro y Libertad, Italo Bocchino, declaró que «el hecho de que el Parlamento presente un proceso contra la magistratura» es un hecho que «objetivamente hace reír» y destacó que «no existen las condiciones para que continúe la legislatura», por lo que exigió la convocatoria de elecciones anticipadas.

Protestas fuera del Parlamento

Mientras los diputados decidían sobre las competencias de los tribunales, cientos de personas se manifestaban a las afueras del Parlamento para denunciar el abuso de funciones que el Parlamento y el Gobierno están llevando a cabo mediante «medidas legales hechas a la carta de Berlusconi». Los congregados gritaron consignas tales como «Silvio Berlusconi debe morir», o «O compra a los jueces o cambia las leyes», llevando a cabo una protesta en la que no se produjeron grandes altercados.

También hoy se espera que cientos de personas acudan al Tribunal de Milán, ya que, no habiendo ninguna decisión aún por parte del Tribunal Constitucional, dará comienzo el juicio contra Berlusconi, tal y como se preveía inicialmente. Aún así, se espera que los abogados defensores pidan la suspensión del proceso justificándose en la falta de esa mención.