Oinarri formalizó 91,5 millones en avales para la economía social
Oinarri desarrolló en 2010 una actividad en avales que alcanzó los 91,5 millones y espera unas cifras similares en el actual ejercicio, como explicó su presidente José Ignacio Zárate. La sociedad de garantía recíproca que nació para atender a la economía social destina ya más de la mitad de su actividad avalista a pymes y microempresas. Tras dos años de crisis, confirmó que se está produciendo «una descapitalización de las empresas», pero vio una mejoría para 2011.
Juanjo BASTERRA
La Sociedad de Garantía Recíproca Oinarri, que dirige su actividad hacia la economía social, las pyme y las micro-empresas, presentó ayer en Bilbo su nueva sede y aprovechó para analizar su evolución y las perspectivas empresariales para 2011, junto con el director gerente de la Cámara de Comercio de Bilbo, Mikel Arieta-Araunabeña.
José Ignacio Garate, presidente de Oinarri, afirmó que en 2010 formalizaron 91,5 millones en nuevos avales, hasta alcanzar un riesgo en vigor por importe de 285 millones. El 43% se realizó por parte de sociedades de Bizkaia, un 30% de Gipuzkoa y un 26% de Araba. El resto es de Catalunya. El año pasado mantuvieron un nivel de solvencia del 11%, superior al 8% que el Banco de España exige a esas sociedades, y en el actual ejercicio esperan cerrar con el mismo porcentaje, para ello reforzaron con los socios protectores de Oinarri y el Ejecutivo de Gasteiz el fondo de provisiones técnicas.
Elena Zarraga, directora de la sociedad, confirmó que en 2011 mantendrán un nivel similar al 2010 en avales y destacó que el año pasado consiguieron un acuerdo con 10 compañías de la economía social de Catalunya en la actividad avalista técnica, que pretenden extender al resto del Estado español «pero siempre que consolidemos nuestra actividad en cada expansión».
Zarate recordó que «la salida de la crisis tardará más de lo esperado» y adelantó que en 2011 se profundizará en «la descapitalización de las empresas, debido a crisis económica». Aunque vislumbró que este año «es posible que aumente el negocio, por los datos que se están produciendo, con lo que la cuenta de resultados llegará al umbral de rentabilidad».
El presidente de Oinarri reconoció que «esa pérdida de patrimonio, tras dos años de crisis, supone una bajada en la solvencia y en los recursos». Los responsables de la Sociedad de Garantía Recíproca reconocieron que los programas de apoyo al circulante desde Lakua «tuvieron un escaso recorrido hasta su modificación», por lo que en 2011 «se acusará de forma especial la morosidad».
El director de la Cámara de Comercio de Bilbao, Mikel Arieta-Araunabeña, recordó que la economía vasca y la vizcaina, en especial, crecerá de forma «lánguida» y dijo que se debe impulsar la investigación, los intercambios con la Universidad y reformar el mercado de trabajo, todo ello con el impulso a la internacionalización. Pero criticó, en este último caso, que tanto el Gobierno español como el de Gasteiz han reducido el apoyo presupuestario a las salidas al exterior «a pesar de que nos dicen que es primordial».