Los trabajadores de la OTA y del servicio de grúa de Irun, que iniciaron el día 1 de abril una huelga de quince días, han decido prolongar la protesta hasta finales de mes al entender que la empresa no ha dado ningún paso para negociar un convenio local que regule sus condiciones laborales. Carmen Díaz, delegada sindical, señaló durante una concentración llevada a cabo el viernes que Eyssa, filial de FCC, «no da señales de vida» y, «si no hay novedades» en las próximas semanas, no descartan prolongar la huelga más allá de abril. Díaz explicó que piden un convenio similar al de otras localidades guipuzcoanas, que mejore su situación laboral, ya que «la única propuesta de la empresa ha sido una subida del IPC».