BERA BERA 28

ITXAKO 33

Itxako ganó con justicia y claridad el partido que le proclamaba campeón de Liga, aunque el Bera Bera no le plantó toda la oposición que cabía esperar. Cuando apenas se llevaban disputados ocho minutos de juego su entrenadora, Reyes Karrere, tuvo que parar el partido tras encajar un parcial de 0-4 y acumular ya cuatro pérdidas de balón. El resultado entonces era considerablemente negativo (3-7), pero no definitivo, y el objetivo de Karrere consistía en reiniciar a sus jugadoras, afectadas por un brutal apagón.

El intento no dio resultado. Itxako mostraba oficio en defensa, buena circulación de balón y gran eficacia de cara al gol, mientras Bera Bera se atascaba en ataque, no conseguía buenas posiciones de lanzamiento ni lanzar con precisión, y además se enredaba en sus propios errores. En el minuto 15, la desventaja ya era de seis goles (6-12).

Con la ventaja a su favor, Itxako se encontraba el escenario ideal en esta semana crucial en su temporada. El Bera Bera no le agobiaba con su defensa, y a las navarras no les quedaba más que aprovechar los nervios de las donostiarras y mantener su acierto cara al gol.

La entrada de Zulai Agirre en el pivote permitió al menos que Bera Bera mantuviera las constantes vitales. La conexión con la primera línea, sobre todo con Punko, facilitó cinco goles de Agirre, pero Bera Bera continuaba renqueante, y las contras de Itxako (siete goles en el primer tiempo) le permitían mantener su ventaja en el marcador.

La segunda parte comenzó con mayor agresividad en la defensa donostiarra, frenada en seco con dos exclusiones para el minuto 6 (en toda la primera parte no había sufrido ninguna), mientras Ambros Martín había dispuesto cambiar su defensa a un 5:1 con Tervel adelantada que le reportó réditos enseguida y contribuyó a encarar una segunda parte bastante controlada.

Última oportunidad

La francesa robó un par de balones en los primeros minutos, sembrando las dudas en la primera línea donostiarra, y además su labor y la de las defensoras centrales de Itxako cegaron la vía para surtir de balones a Agirre (la pivote sólo recibió tres balones en condiciones en la segunda mitad: uno fue penalti, y dos goles, uno de contrataque de segunda oleada a cinco minutos del final, y el otro cuando quedaban 30 segundos). Itxako sólo tenía que esperar a que corriera el reloj.

Aún así, Bera Bera dispuso de una oportunidad, la única, para poder reengancharse al partido. Con 18-25 Eider Rubio marcó de penalti, y en la siguiente acción una pérdida de balón de Macarena Aguilar fue aprovechada rápidamente por la propia Rubio para lanzar desde su propia área y marcar, aprovechando que Silvia Navarro había salido de su portería para impedir el posible contrataque.

Las gradas vibraron por unos momentos: 0-2 de mini-racha y gol espectacular, 20-25. Itxako, que tenía dos jugadoras excluídas, pareció perder un poco los papeles, Pinedo mandó dos balones al poste y uno fuera, Aguilar cometió una falta de ataque, Kurbanova falló un remate ante Obein y Bera Bera dispuso de cinco balones al contrataque (tres de Matxalen Ziarsolo -partido para olvidar el suyo de ayer, algún dia tiene que tocar- y dos de Libe Altuna), todos parados por Navarro -que además detuvo dos penaltis-. Ahí se acabó el partido.

Tras recuperar a sus jugadoras, Itxako recompuso su figura, aumentó su ventaja y se dejó llevar hasta el final. El resultado fue justo con el juego de ambos equipos, y las navarras dispusieron de unos minutos -pocos- para disfrutar del título al acabar el partido. El Gyor le espera el domingo, y seguro que le causará muchas más dificultades.