El ministro marfileño de Justicia del Gobierno de Alassane Ouattara va a pedir al procurador de bidjan que abra una investigación contra los miembros del Gobierno de Laurnet Gbagbo acusados de cometer crímenes. Mientras tanto, en las calles de Abidjan las fuerzas de Ouattara proceden a detener a personas acusadas de ser milicianos seguidores de Gbagbo, sobre todo en los barrios donde el ex presidente contaba con mayores apoyos.

Las Fuerzas Republicanas de Costa de Marfil (FRCI) arrestan a los presuntos milicianos guiados por las acusaciones de algunos vecinos y aseguran entregarlos a la Policía para evitar que los maten, siguiendo las directrices de Ouattara, aunque algunos soldados no ocultan sus deseos de venganza.