Los jóvenes de entre 16 y 35 años sufren el 40% de los accidentes laborales
En la víspera de la celebración del Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el Trabajo, el Consejo de la Juventud de Euskadi alertó ayer de que los jóvenes de entre 16 y 35 años sufren el 40% de los accidentes laborales, pese a que la población activa en ese tramo de edad representa sólo el 31%. Los elevados ritmos de trabajo, unidos a la creciente precariedad, constituyen un peligroso cóctel a juicio del Consejo de la Juventud.
Juanjo BASTERRA | BILBO
Euskadiko Gazteriaren Kontseilua-Consejo de la Juventud de Euskadi (EGK) dio ayer a conocer un manifiesto, apoyado por doce organizaciones sindicales, sociales y políticas, en el que se afirma con rotundidad que «las penosas condiciones laborales elevan la siniestralidad laboral juvenil» y recuerda que el 40% de los accidentes laborales se producen entre personas que cuentan entre 16 y 35 años, cuando la población activa en ese tramo de edad representa sólo el 31%.
Estos datos se dieron a conocer ayer en la víspera de la conmemoración del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo y se ven corroborados por los informes de la Agencia Europea, con sede en Bilbo, que reconoce que los trabajadores de entre 18 y 24 años tienen «al menos un 50% más de probabilidades de sufrir lesiones en el trabajo que los trabajadores con más experiencia». La agencia advierte, a su vez, que «cada tres minutos y medio muere una persona» en la Unión Europea por causas relacionadas con el trabajo, pese a encontrarnos en una economía desarrollada.
Los jóvenes son una parte importante de ese drama. Para EGK, «las penosas condiciones laborales a las que estamos sometidos perjudican gravemente la salud, tanto física como mental». Tasas de temporalidad muy elevadas e inestabilidad crónica, tasas de paro del 43%, que ya casi triplican a las del resto de la población, salarios un 52% más bajos y un uso sistemático de fórmulas excepcionales de contratación que «invisibilizan los accidentes laborales, ya que no cuentan en las estadísticas oficiales, como los de las trabajadoras del hogar» son elementos comunes y preocupantes asociados al conjunto de los jóvenes trabajadores, según denuncia el Consejo.
Peor con la reforma laboral
A todas estas características negativas se unen «grandes cargas de trabajo, horarios inapropiados, sobrecualificación, puestos que imposibilitan la negociación colectiva, empleo en economía sumergida, alta movilidad geográfica y subcontratación».
EGK denuncia que esa radiografía negativa del mercado laboral se agudiza debido a «la reforma laboral y al Acuerdo Social y Económico», porque «facilitan el despido y rebajan el índice de absentismo porque se puede echar al trabajador por `causas objetivas' ante faltas reiteradas al trabajo». También denuncia el Consejo de la Juventud que «se ha otorgado a la Seguridad Social la posibilidad de dar de alta a una persona trabajadora enferma, sin contemplar la opinión del médico de cabecera de Osakidetza».
Este cúmulo de «agresiones» se completa, a juicio de EGK, con que se han otorgado a las mutuas mayores facultades de control de las bajas laborales de corta duración y «se ha concedido más peso a las ETT y se ha abierto el paso a las agencias privadas de colocación con ánimo de lucro».
Este organismo de la juventud denuncia que «la labor de quienes deben velar por la salud y seguridad en el trabajo, es decir la Autoridad Laboral, Inspección de Trabajo y Osalan, es escasa y parcial». Por lo que EGK y las asociaciones sindicales, sociales y políticas han pedido derogar la reforma laboral y de pensiones y limitar la temporalidad, para impedir que aumente la precariedad.
En la UE se producen 165.080 muertes al año. De ellas, 5.580 se deben a accidentes de trabajo y el resto a enfermedades profesionales ligadas a la actividad laboral. Así, la Agencia Europea, con sede en Bilbo, afirma que cada «tres minutos y medio muere una persona en la UE por causas relacionadas con el trabajo».
Eurofound, conocida por la Fundación Dublín, afirma que están aumentando los ritmos de trabajo, lo que unido a la elevada precariedad, como denuncia el Consejo de la Juventud de Euskadi (EGK) aumenta el riesgo de sufrir un accidente entre los jóvenes.
La mayoría sindical vasca, formada por ELA, LAB, STEE-EILAS, EHNE e Hiru, denunciará hoy ante el Instituto Navarro de Salud Laboral los problemas tan importantes que en materia de salud laboral padece la clase trabajadora. Este acto es previo a la celebración mañana del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo.
«Gure osasunari eraso gehiagorik ez. Tenemos alternativa» es el mensaje que trasladarán en Iruñea, donde informarán también de las once medidas para conseguir «un empleo saludable, de calidad y seguro». Mañana, la mayoría sindical celebrará un mitin en el frontón La Esperanza de Bilbo y después una manifestación hasta la sede de Lakua en Bilbo.
CCOO Euskadi, por su parte, inició ayer en Gasteiz los actos conmemorativos, que continuarán hoy en Donostia, para terminar mañana en Bilbo. En la capital guipuzcoana se celebrará una asamblea en la que intervendrán Unai Sordo, Jesús Uzkudun y José María García. Después llevarán a cabo una manifestación desde Anoeta hasta la Delegación Territorial de Sanidad. Por otro lado, CGT, ESK, CNT y Solidari se han unido y se concentrarán mañana ante la sede del Gobierno foral en Iruñea a las 12.00 horas para denunciar que «la precariedad perjudica la salud».
Por último, las asociaciones «Langile Oroitarria», de Errotxapea, e «Iniciativa Popular 28 de abril», de Atarrabia, han organizado una marcha reivindicativa para el Día Internacional que unirá el barrio y el municipio a partir de las 18.30. A las 20.00 harán un homenaje a los trabajadores fallecidos y sus familiares. J. BASTERRA