«Lo que me propongo es tender puentes entre el arte y la ciudadanía»
Nuevo Director del Centro Uharte
Licenciado en Historia del Arte, trabajador del Gobierno de Nafarroa y miembro de la Comisión de Patrimonio Artístico de la UPNA, Javier Manzanos fue nombrado ayer nuevo director del Centro Uharte. Estaba nervioso y contento, con muchas ganas de afrontar este nuevo reto. «Lo que quiero es incidir en abrir aún más el centro, para que sea un lugar útil, que despierte curiosidad», declaró.
Maider IANTZI | IRUÑEA
Ha dirigido toda su carrera a la historia del arte y, en concreto, al arte contemporáneo, y eso se relaciona con su preocupación o interés de acercar ese arte a la sociedad. Ve que hay una gran brecha entre el arte actual y la ciudadanía, y lo que se propone es tender puentes para que se acerquen.
¿Qué va a traer de nuevo al centro? ¿Y cuáles son los valores intrínsecos de este lugar?
Creo que el proyecto tiene unos valores interesantes, en el sentido de que es un centro de cultura contemporánea abierto y dinámico, y lo que yo quiero es incidir en abrirlo más todavía, para que sea un lugar útil, que despierte curiosidad, que nos anime a visitarlo. Y, para ello, en el proyecto articulaba una serie de servicios, actividades, propuestas, que son las que quiero llevar a cabo y que despierten esa curiosidad y ese interés.
¿Destacaría alguna idea o algún valor importante?
El planteamiento parte de pensar globalmente para actuar localmente; quiero que el centro sea un referente en el arte contemporáneo, ya que es el único equipamiento específico en Navarra dedicado a este arte. Por otro lado, deseo trabajar con las manifestaciones de la creación contemporánea desde una mirada transdisciplinar, en la que todas las disciplinas tienen hueco, se juntan, se unen, se mezclan. Hay que trabajar con todas las expresiones de la creación, desde la innovación, desde la experimentación.
¿Tienen programada alguna nueva actividad?
Sí. Yo planteaba una serie de servicios en el proyecto, que quiero introducir a corto y medio plazo. Esos servicios, que tienen la vocación de continuar en el tiempo, son, en primer lugar, una oficina del arte que sea interlocutora con los artistas, los agentes, las iniciativas públicas y privadas. En segundo lugar, planteo un laboratorio del arte, como un espacio que no tenemos en Navarra y es necesario para favorecer la creación y la investigación. El tercer eje es la creación de un centro de documentación con dos vertientes: por un lado, un archivo de artistas actuales navarros, como una ventana viva de acercamiento y conocimiento, y por otro lado, un archivo de arte contemporáneo navarro para reunir, conservar, difundir todos los documentos que podamos, para explicar y recorrer la historia. También es una parte importante del proyecto la creación de un departamento de acción y educación cultural.
¿Cuál va a ser la relación con otros centros y museos de arte contemporáneo?
Todo lo buena que sea posible. Algo que nos enseña la crisis y el sentido común es que tenemos que conectar las buenas iniciativas, compartirlas, comunicarlas y aprovecharlas.
Le quería preguntar también sobre la situación del arte contemporáneo en Nafarroa, y el lugar que ocupa este centro.
No es un buen momento: la crisis ataca por las partes más débiles, y la cultura, en concreto el arte contemporáneo, es uno de esos puntos. Sin embargo, tenemos cantera; yo creo que es el momento en que más y mejores artistas hay en Navarra. Volviendo a lo que te decía al principio, este centro debe ser ese espacio de referencia.
Y un punto de encuentro, ¿no?
Sin duda. Quiero que sea un espacio abierto. Creo que tiene que tener una vocación de servicio público, de que todo el mundo entre, cuantos más públicos podamos llegar a interesar, mejor estaremos cumpliendo nuestra misión.
ADACE (Asociación de Directores de Museos de Arte Contemporáneo de España) ha denunciado que su nombramiento es contrario al documento de buenas prácticas. ¿Quiere decir algo al respecto?
Leí esta noticia en prensa, y la verdad es que me sorprendió muchísimo. Me dejó muy tranquilo la aparición en prensa de un miembro del IAC (Instituto de Arte Contemporáneo) y, además, del Patronato. Tenía toda la información precisa que yo no tengo, puesto que he sido uno de los participantes, no uno de los valoradores del jurado. Esta persona declaraba que se había respetado absolutamente el documento de buenas prácticas.
¿Cómo ha vivido las polémicas relacionadas con el centro?
No tengo más información de lo que habéis recogido los medios. Al principio era una iniciativa del Ayuntamiento de Uharte, que decide sacar a concurso; una empresa privada gana, y llega un momento en que el Ayuntamiento dice que no puede sostener económicamente ese centro. Pide ayuda al Gobierno de Navarra y éste entra en ese Patronato para dotarle de unos mínimos que permitan su supervivencia... ¿Eso es polémico? Esa es la historia del centro.
Decía polémico, porque algunos opinaban que el proyecto estaba sobredimensionado.
El promotor del centro, el Ayuntamiento de Uharte, no pudo sostenerlo. Eso ha ocurrido, pero yo no tengo nada que opinar o decir. No creo que me afecte; al contrario, me encuentro en un espacio muy bien dotado para el arte contemporáneo, donde se pueden hacer muchas cosas. Tenemos un presupuesto muy ajustado y tendremos que buscar recursos, tendremos que darle vida al proyecto. De hecho, el Gobierno de Navarra este año ha demostrado su compromiso, subiendo un poco la partida del presupuesto. Eso me anima a creer que el centro puede tener interés para la sociedad y ser apoyado por ella.