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Los talibanes de Pakistán matan a diez soldados y destruyen dos aviones

Un comandó talibán asaltó una base militar en Pakistán y logró destruir dos aviones P-3C Orion de vigilancia de fabricación estadounidense, mantener durante 17 horas bajo su control el edificio principal de una de las bases más vigiladas del país y matar a trece soldados

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Hasan MANSOOR (AFP) |

El Ejército paquistaní pudo retomar el control de una base aeronaval atacada por un grupo talibán después de 17 horas de combates en los que murieron al menos diez militares. El ataque comenzó en la noche del domingo y se prolongó hasta ayer. Según los militares, entre cuatro y seis talibanes -entre 15 y 20 kamikazes según los talibanes-, aprovecharon la noche, sobre las 23.00, para entrar en al base aeronaval de Mehran, enKarachi.

Una vez en el interior, abrieron fuego con armas ligeras y un lanza-cohetes, destruyendo dos aviones de vigilancia costera de la Marina,P-3C Orion, suministrados por EEUU, según explicó el comandante Salman Ali, portavoz de la Marina. El Ejército indicó que diez militares de este cuerpo murieron en el enfrentamiento.

Vengar a Bin Laden

Aseguró que cuatro asaltantes murieron al hacer estallar un chaleco explosivo y otros dos lograron huir. Además 17 extranjeros, entre ellos once trabajadores chinos, pudieron salir sanos y salvos. «Reivindicamos este ataque para vengar a Osama», declaró un portavoz del Movimiento de Talibanes de Pakistán (TTP), grupo aliado de Al Qaeda y que, desde verano de 2007, lleva a cabo una campaña de atentados. El TTP juró vengar la muerte de Osama Bin Laden, a manos de un comando estadounidense, tomando como objetivo, sobre todo, a las fuerzas de seguridad paquistaníes, a las que acusan de ser cómplices de la operación.

Los atentados del TTP y grupos islamistas aliados han dejado 4.400 muertos en casi cuatro años. Es el tercer ataque en represalia por la eliminación del líder de Al-Qaeda. El primero fue un doble atentado suicida ante un centro de entrenamiento policial en la ciudad de Shabqadar, que causó 98 muertos el pasado 13 de mayo. El viernes también reivindicó un atentado con bomba contra vehículos de diplomáticos en el consulado de EEUU en Peshawar, matando a un civil e hiriendo levemente a dos estadounidenses.

El pasado domingo, varios miles de personas se manifestaron en Karachi para reclamar el fin de los ataques casi diarios de los aviones no tripulados de la CIA en las zonas del noroeste, fronterizas con Afganistán. Ayer siete insurgentes murieron en uno de estos ataques, según las fuerzas de seguridad.

«SANO Y SALVO»

Los talibanes, tanto afganos como paquistaníes, aseguraron que su líder, el mulá Omar, está «sano y salvo» en Afganistán, desmintiendo la noticia de que había muerto en combate.

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