Integrantes de una decena de colectivos de mujeres de Ezkerraldea y Meatzaldea se desplazaron ayer hasta Bilbo para concentrarse ante la Delegación de Sanidad reivindicando mejoras en el control médico de las mujeres, especial- mente por el establecimiento en la red dependiente de Lakua de revisiones ginecológicas «preventivas, periódicas y completas».

La movilización se efectuó dentro de la campaña ``Las mujeres tenemos saludables razones para protestar'', con la que exigen información sobre sexualidad y menopausia, además de reclamar anticoncepción e interrupción voluntaria del embarazo. Para las concentradas, la actitud de Lakua no se corresponde con el aumento de la conciencia de las mujeres sobre la importancia de la prevención, el uso de anticonceptivos y la preocupación por el cáncer ginecológico.

«La supresión de las revisiones ginecológicas preventivas en Osakidetza genera malestar en las mujeres que seguimos reivindicando revisiones para la prevención de cáncer de útero y de mama a partir de los 40 años, ya que en 2010 Osakidetza calcula que un 8% (13.600) de las 170.000 mujeres vascas entre 40 y 50 años podían sufrir esta enfermedad», explicaron las concentradas.

A las puertas de la sede, las mujeres mostraron «una honda y grave preocupación» por la salud de todo el colectivo y denunciaron la actitud de Osakidetza. Demandaron la necesidad de garantizar en la red pública sanitaria la prevención «como la manera más razonable de evitar a tiempo patologías y que éstas puedan ser detectadas y tratadas lo antes posible».

Hay recursos

También apostaron por dedicar más recursos, «ya que se suele argumentar por parte de los responsables de Osakidetza que éstos son limitados. Sin embargo -explicaron las concentrados-, no lo son para otros gastos menos sociales y que nada tienen que ver con la salud».

Advirtieron además de que las más perjudicadas por esta situación serán las mujeres con menos recursos económicos, «las más desfavorecidas, pues la eliminación de las revisiones ginecológicas periódicas deriva hacia la medicina privada a un buen número de mujeres que no se resigna a no someterse a una revisión periódica en la sanidad pú- blica».