«Superbrother» o la necesidad de tener un poderoso Hermano Mayor
M.I. | DONOSTIA
Por fin el cine familiar puede contar con una película diferente, una imaginativa creación que ganó en el Festival Robert el premio a la Mejor Película Infantil. «Superbrother» es el cuarto largometraje para el cine del danés Birger Larsen, que comenzó su carrera como actor a las ordenes de Soren Kragh-Jacobsen, formándose luego como ayudante suyo.
Con elementos fantásticos, «Superbrother» es una historia narrada desde el punto de vista de un niño de diez años, cargado de una gran responsabilidad para su edad, al tener que ayudar a su madre soltera en el cuidado de su hermano mayor, que es autista.
El pequeño siempre sueña con lo que sería tener un hermano mayor capaz de defenderle. Sus deseos se hacen realidad un día que su hermano, que se pasa las horas muertas contemplando el cielo en silencio, entra en contacto con una fuerza extraña que le cambia por completo. Descubre que tiene superpoderes, aunque éstos no son eternos, y para administrarlos contará una vez más con la ayuda del pequeño Anton.
Esta cinta danesa no tiene nada que ver con las películas de superhéroes al uso, por inscribirse de lleno en una situación cotidiana y apelar a la imaginación infantil como principal recurso fantástico. Habla de sueños que se hacen realidad.