Natxo Urkixo | Cabeza de lista de Bildu en Laudio
«Tenemos que trabajar a pie de calle, hablando con la gente de Laudio»
La cita electoral del 22 de mayo otorgó la victoria a Bildu en las urnas de Laudio. Sin embargo, su candidato, Natxo Urkixo, todavía desconoce si podrá gobernar, ya que un pacto entre PNV, PSE y PP podría arrebatar la Alcaldía a la coalición abertzale.
Bildu ha irrumpido con fuerza en el Ayuntamiento de Laudio. ¿Está satisfecho con los seis ediles que han obtenido en la cita electoral?
Estoy satisfecho con los resultados que ha obtenido Bildu en Laudio, pero podría estar más satisfecho aún. De todos modos, no me voy quejar.
Se ha puesto fin a ocho años de Gobierno jeltzale, ¿contaban con desbancar al PNV de la Alcaldía?
Era un objetivo que teníamos en mente. Sin embargo, existían dudas ante la presencia de nuevas formaciones y plataformas. En Laudio se presentaba una [OMNIA], y sabíamos que podía contar con bastantes votos. Pero desde Bildu nunca hemos perdido la esperanza.
Su coalición no ha logrado la mayoría absoluta y tendría que pactar para gobernar, ¿ha mantenido algún contacto con el resto de formaciones?
Desde el día 22 hemos mantenido contactos con todos los grupos. OMNIA afirma que no apoyará ni a Bildu ni al PNV; los jeltzales decían que no iban a presentar a un candidato, pero tras la decisión de su Asamblea parece que Lasa sí optará al cargo de alcalde. Por su parte el PP ha anunciado su apoyo a este último. Y el PSE, por ahora, afirma que no apoyará al candidato del PNV.
De todos modos, ¿teme que en el último momento se pueda dar un pacto entre PNV, PSE y PP?
No tenemos miedo, pero sabemos que puede suceder. No obstante, sería duro para el PNV tener que explicar ante sus votantes el porqué de un pacto con aquellos que les han expulsado del Gobierno de Lakua. Aun así, no soy quien para decirles lo que deben hacer.
En el caso de que el PP se haga con la Diputación de Araba, ¿cree que la institución podría marginar a Laudio?
Eso no sería una sorpresa. El PP ha dicho por activa y por pasiva que se va a posicionar de forma beligerante contra Bildu. Imagino que, en el caso de gobernar Araba, intentarán castigar a los ayuntamientos abertzales del herrialde.
¿Dicha situación se puede ampliar a toda la zona de Aiara?
Aiara siempre ha despuntado y ha cambiado el espectro político de Araba, no tenemos nada que ver con La Rioja Alavesa o Lautada. Por ello llevamos marginados bastante tiempo. Es más, la única presencia que tiene la Diputación de Araba en todo el valle es la oficina de Hacienda de Laudio. Una oficina para cobrar impuestos.
De cara a la política local, ¿cómo afronta la próxima legislatura?
Por delante quedan cuatro años en los que hay que trabajar mucho, trabajar a pie de calle, hablando con la gente de Laudio. Dentro del Ayuntamiento tendremos que hablar con todos los grupos para negociar prácticamente todo. Además, habrá que evitar el posible boicot que puedan realizar el resto de partidos políticos.
En temas concretos, ¿qué opinión le merece la polémica suscitada en torno a la antena de Larraño?
Hace tiempo que los vecinos de Larraño mostraron sus quejas por la proximidad de la antena, y creo que tras la realización de un estudio se ha optado por apartar la antena unos metros. En el tema de la antenas, por lo que he podido leer y escuchar, coexisten dos parámetros, uno es la intensidad con la emiten las radiaciones, y otro el tiempo de exposición. Por lo que sé, lo perjudicial es la intensidad, no el tiempo. Por ello se debería realizar un estudio para ver qué niveles de intensidad son lo que perjudican a la salud, y en función del estudio se deberán estudiar que posibilidades existentes para bajar la intensidad de las emisiones.
A parte de la antena de Larraño, durante los últimos meses se ha debatido sobre el posible derribo de la Casa Rosa de Areta. ¿Qué opinión le merece el conflicto con URA?
En el último pleno el Ayuntamiento llegó a un acuerdo con los vecinos de la Casa Rosa, debido a que URA había cambiado las expectativas de inundaciones. En un informe elaborado con la vista puesta dentro de 100 o 200 años, la Agencia Vasca del Agua constató que la Casa Rosa dejaba de estar en una zona conflictiva. Sin embargo, es un tema con el que no hay que acomodarse y pensar que ya está solucionado.
Por otro lado, hace unos meses Kontseilua publico un informe en el que se criticaba la política lingüística del Ayuntamiento de Laudio. ¿Cómo pretenden impulsar el euskara?
Nuestra postura en este tema es muy clara: el euskara es nuestro idioma y es en el que tenemos que hablar en el pueblo. Por ello tenemos que hacer los posible para que se normalice su uso. Durante los últimos años, según los datos de Kontseilua, Laudio ha pasado de ser una población ejemplar en la recuperación del euskara a tener un suspenso rotundo. Hay que poner medios para evitar este suspenso, y para ello se debe organizar una oficina técnica de normalización lingüística. Ion SALGADO