Controles policiales masivos a inmigrantes ante un centro de Cáritas
GARA
Cáritas de Gipuzkoa denunció ayer la realización de controles policiales «masivos» de identificación a personas inmigrantes a las puertas de uno de sus centros de Donostia, lo que está causando «un grave daño» a su labor de ayuda social.
Durante la presentación de su memoria de actividad de 2010, acto del que informó la agencia Efe, el delegado episcopal y el secretario general de la delegación guipuzcoana de esta organización socio-caritativa de la Iglesia católica, José Ramón Treviño y José Emilio Lafuente, respectivamente, expresaron su preocupación por estos procedimientos, que calificaron de «injustos y arbitrarios».
Según explicaron, desde principios de año se han registrado «varios incidentes» de este tipo, con mayor incidencia en el último mes, cuando se ha realizado media docena de controles policiales en las proximidades del centro de atención y acogida a inmigrantes Laguntza-Etxea, en el barrio de Intxaurrondo. El «más grave», precisó Lafuente, se produjo el pasado día 8, cuando efectivos de la Policía española, junto a agentes de la Guardia Municipal, practicaron una redada en la misma puerta de Laguntza-Etxea que se saldó con la retención de una decena de inmigrantes en situación administrativa irregular y la apertura de sendos expedientes de expulsión.
«Oleada de racismo»
José Ramón Treviño criticó el hecho de que estos dispositivos policiales «selectivos», que «no son de seguridad ciudadana o de control de delincuencia», se dirijan exclusivamente contra personas «con determinados rasgos étnicos».
Que puedan ser inmigrantes sin papeles no los convierte en delincuentes, subrayó el delegado episcopal, quien alertó sobre el «recrudecimiento» generalizado de las medidas contra la inmigración y «la oleada de racismo y xenofobia que viene de Europa».