NUEVO MAPA INSTITUCIONAL EN EUSKAL HERRIA
Zapatero asegura que no le «gusta nada» que Bildu gobierne Gipuzkoa y Donostia
En el primer día de mandato de Garitano, el presidente del Gobierno español se refirió al tema en Bruselas, mientras que en Madrid el ministro de Interior aseguraba que «estaremos encima para que cumplan la ley»
I.I. | GASTEIZ
En su primera jornada como diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano comenzó el día con una minigira por varias radios para ofrecer entrevistas y a las 10.30 de la mañana acudió a la Diputación, donde su antecesor, el jeltzale Markel Olano, le recibió cordialmente para enseñarle las dependencias en las que trabajará en adelante, presentarle a los funcionarios y despachar sobre los primeros asuntos forales. Además, Garitano firmó los ceses de los anteriores diputados forales que se publicarán en el Boletín Oficial. Luego, más entrevista.s
Mientras el encuentro en la plaza de Gipuzkoa se celebraba en ambiente de normalidad y en tono incluso afectuoso, el unionismo español seguía expresando su indignación porque la realidad vasca contradice sus teorías.
Dice el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que «no le gusta nada» que Bildu gobierne en Gipuzkoa y en Donostia. Y amonesta al resto de fuerzas polí- ticas demandándoles que hagan una «reflexión» sobre el hecho de que no teniendo mayoría absoluta en ninguna de las dos instituciones, haya acabado presidiendo ambas.
Su vicepresidente y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, adoptó un tono más amenazante, al anunciar que «estaremos encima para que cum- plan la ley». Según explicó, el Gobierno se va a mover en ese triángulo: vigilar el cumplimiento de la ley, recordar a Bildu que no tiene mayoría y mantener la «política antiterrorista» hasta que «ETA lo deje».
También Zapatero destacó que Bildu «va a tener que cumplir la ley, toda la ley»
Garitano, con la mano tendida
El tono amenazante de Madrid, el faltón que pudo volver a escucharse de boca del presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, en el Parlamento de Gasteiz, y el autoritario del lehendakari contrastan con el men- saje de mano tendida y de búsqueda de un futuro compartido que sigue manteniendo Bildu.
Martin Garitano volvió a insistir ayer en que su deseo es mantener una «relación preferencial» con el PNV, que es la segunda fuerza en Gipuzkoa con un importante apoyo electoral. Además, dio por seguro que podrá alcanzar acuerdos puntuales con el PSE en materia social. E incluso mostró su convicción de que hay materias en las que podrá coincidir con el PP, y puso como ejemplo la retirada de los peajes en la N-1.
Bildu sostiene que «la situación ha cambiado mucho en Euskal Herria y esto hará que sea mucho más fácil mantener relaciones con el resto de partidos políticos».
López y Basagoiti, tarde
Martin Garitano apunta que «está a la vista de todo el mundo» que se ha superado «una época» y que «en política cada uno tendrá que hacer su ciaboga». Auguró que este giro «unos lo harán a un ritmo y otros a otro, teniendo en cuenta sus propias condiciones», pero que «tarde o temprano escucharemos y veremos posturas que ahora parecen impensables».
Si como augura Garitano «tarde o temprano» veremos cambiar posturas, tras el debate de ayer en el Parlamento de Gasteiz da la impresión de que el lehendakari, Patxi López, y el presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, van a ser de los últimos en llegar al cambio.
Ayer tocaba pleno de control al Gobierno y el PP optó por hacer al lehendakari dos preguntas sobre la presencia de Bildu en las instituciones: una sobre qué iba a hacer el Ejecutivo de López ante los retos económicos que esto plantea y otra en materia de «deslegitimación del terrorismo».
Como corresponde a un debate entre dos socios, hubo algunos reproches mutuos pero los grandes golpes fueron para Bildu, que en ese marco no tenía recurso a la defensa. Basagoiti habló de «gente gobernando que defienden infraestructuras prehistóricas, gente gobernando que defienden un sistema económico soviético, gente gobernando que están en el fanatismo y en la paranoia política». Y López aseguró que los miembros de Bildu, en campaña y hasta la fecha, «no han hecho nada. Ni una sola propuesta, ni un solo proyecto, nada».
En lo que ambos estuvieron de acuerdo es en la necesidad de potenciar acuerdos entre PSE, PP y PNV para garantizar gastos como el del TAV y el puerto exterior de Pasaia, y algunas otras políticas comunes. Y Basagoiti le advirtió al lehendakari que si no es el Gobierno de Lakua quien lidera esos asuntos, «lo hará el PP».
Romero critica a los empresarios
El PSE de Gipuzkoa también parece tener ciertas dificultades para aceptar la situación actual. La candidata de este partido, Rafaela Romero, afirmó ayer en RNE que los empresarios vascos mostraron su apoyo a dar una oportunidad a Bildu para gobernar, algo que, asegura, no hicieron con Patxi López.
Luego, Rafaela Romero añadió que en su trabajo desde la oposición, el PSE se dedicará a volver a exigirle a Bildu que condene a ETA «desde el minuto uno», además de centrarse en el que a su juicio es el principal problema de Gipuzkoa, que es «un montón de parados a los que el derecho a decidir no les paga la hipoteca».
El presidente del BBB, Andoni Ortuzar, apuntó ayer que el PNV podrá gobernar Gipuzkoa «desde la oposición» como, según asegura, hace en Lakua. En cuanto a los acuerdos con Bildu, dijo que «eso dependerá más de ellos que de nosotros».
Bildu denunció ayer que el plan de representación de los partidos en los organismos y sociedades públicas del Ayuntamiento de Iruñea presentado por UPN pretende excluir a la coalición abertzale de Gerencia de Urbanismo, Escuelas Infantiles, Comiruña, Mercairuña, Animsa, PCH, Consejos de Salud, Matadero y Consorcio del TAV, sin explicaciones y dando representación a partidos con menor respaldo electoral como el PP. GARA
La presidenta de UPyD, Rosa Díez, afirmó ayer de nuevo que la entrada de Bildu a las instituciones le recuerda a lo ocurrido en «el 33 en Alemania», cuando los nazis llegaron al poder y los ciudadanos prefirieron pensar que habían llegado «los buenos».
El presidente electo de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, se mostró ayer «escandalizado» por «ver cómo los hijos de ETA y Batasuna toman posesión con tanta jactancia y arrogancia» en instituciones de Euskal Herria.
La presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza, cuya hija murió el 11-M, dijo ayer que «es una vergüenza que esté en las instituciones esta gentuza, que son socios de ETA o los mismos de ETA, con la información y el dinero que van a recibir».
El diputado de IU, Gaspar Llamazares, señaló ayer que «el desmesurado poder» que ha logrado Bildu tras el 22-M pone de manifiesto «el fracaso de la estrategia de la ilegalización».