En la Plaza del Castillo está brotando un enorme escenario y, murallas abajo, el montaje de las barracas va avanzando día a día, tomando el cuerpo de una pequeña ciudad que tendrá en el centro una noria. La llegada de los sanfermines se ve en cada calle, donde los comercios de ropa han reducido su oferta a prendas en blanco y rojo. El penúltimo paso se dio ayer, cuando se desvelaron los dibujos de las pancartas de las peñas, en los que se ha trabajado en secreto durante los últimos meses.

Después de un año de luto en el que las 16 peñas tiñeron de negro sus telas como protesta por la persecución que el Ayuntamiento realizó a los actos festivos populares y la libertad de expresión, en 2011 recuperan su color, y también su mala leche. Yolanda Barcina, hoy presidenta y ayer alcaldesa de la capital navarra, se hace omnipresente. Unas veces se parapeta tras un escudo castellano animando a domar a los vascones; en otras aparece sobre un trono de reinona... y hasta han llegado a convertirla en la central nuclear de Fukurzina. En total, han sido doce las peñas que no han podido resistirse a los encantos de su musa de los últimos años, la nueva presidenta navarra (arropada en varias de ellas por su número dos en el nuevo Gobierno, Roberto Jiménez, líder del PSN).

A su gran presencia ha ayudado, precisamente, el escándalo de la pancarta que llevaron a la plaza de toros unos policías, a sueldo del Ayuntamiento, que rezaba «Olé tus huevos, Barcina», así como el tema «La Bofetada» de la rapera La chula potra, en el que critica de forma mordaz a la ex alcaldesa.

Por otra parte, destaca el mensaje en contra de la violencia machista que han introducido las peñas de Sanduzelai dedicando a ello parte de la tela y, sobre todo, La Jarana, que ha hecho de su pancarta un alegato en contra de las agresiones sexistas sin perder el tono de humor que caracteriza a todas estas enseñas.

El «patadón» a José Antonio Camacho como entrenador de Osasuna también ha inspirado los pinceles, retratando al entrenador como un niño llorón o a través de un titular de prensa en el que se le tacha de incompetente. La aparición de Bildu en escena y las patillas de Maiorga Ramírez irrumpen como otro tema estrella, sin que eso suponga que las peñas abandonen clásicos como la Policía Municipal, con Simón Santamaría al frente, haciendo una sátira con su facilidad para soltar la porra; la peña San Fermín, directamente, coloca en manos del ex militar un bate de béisbol.

Tanto San Fermín como Armonía Txantreana, que fueron denunciadas hace dos años por el Ayuntamiento por un supuesto delito de «enaltecimiento del terrorismo», echan en cara al Consistorio que aún les debe la subvención de 2009. La segunda detalla la factura: 11.263 euros.

Iniciativas para estos sanfermines

La Federación de Peñas repartió ayer las imágenes con los dibujos a los medios de comunicación, pero no será hasta este sábado cuando las pancartas se den su primer paseo por Alde Zaharra. Este fin de semana, el último antes del chupinazo, se celebra el Día de las Peñas, que llega cargado de actos festivos y que, en esta ocasión, tendrá un evento previo. Será el viernes a las 19.30, con la proyección del documental «Nagore», de Elena Taberna, que ahonda en la muerte de Nagore Laffage el 7 de julio de 2008. La emisión se completará con una charla para concienciar sobre los casos de violencia machista en la que estarán presentes familiares de la joven de Irun. Ya el sábado, la fiesta arrancará con una exposición de artesanía; luego habrá hamaiketako, comida, kalejira, bailables y se celebrará el Festival de la Meca. Habrá que esperar hasta las ocho de la tarde para ver las lonas, que quedarán expuestas en la Plaza del Castillo.

En la presentación de las pancartas tomaron la palabra Josu Izquierdo, responsable de la peña Donibane, y Endika Lacuey, presidente de la federación. Ambos aprovecharon para lanzar sus propuestas para estos sanfermines, que se centra en recuperar la calle como espacio popular y festivo. En concreto, intentarán impulsar meriendas autogestionadas que sirvan de alternativa a quienes no van a los toros, ya que, durante la corrida, el ambiente en Alde Zaharra decae. Lacuey desvinculó esta iniciativa de la merienda en la Avenida Carlos III, el domingo de los sanfermines del pasado año, cuando se negaron a acudir a la plaza por desavenencias con el Ayuntamiento. Para impulsar las meriendas populares, las peñas enviarán dos txarangas todos los días a la Plaza San Francisco para amenizar la tarde y se facilitaran infraestructuras para su limpieza. De paso, Lacuey afirmó que cada vez acude menos gente a los toros.