Los beneficios de las empresas no financieras crecen un 9,6% hasta marzo
Los beneficios de las empresas no financieras hasta marzo, según informó ayer el Banco de España, crecieron en un 9,6% y el negocio de las empresas aumentó en un 23,7%. Por el contrario, los gastos de personal sólo crecieron un 0,1%, según esos datos oficiales.
Juanjo BASTERRA | BILBO
La información recopilada por la Central de Balances Trimestral del Banco de España, que analiza los resultados de las empresas no financieras durante el primer trimestre de 2011, indica que el resultado fue positivo y creció en un 9,6%. El incremento total del negocio de las empresas subió un 23,7%, por encima del mismo período del año pasado. Por el contrario, los gastos de personal sólo aumentaron en un 0,1% hasta marzo.
A juicio del Banco de España la economía del Estado español continúa en una senda de «suave recuperación». Así, «el crecimiento de los beneficios ordinarios fue suficiente para que los niveles de rentabilidad se mantuvieran en valores similares a los registrados durante los tres meses del ejercicio pasado», indica el informe oficial.
A juicio del Banco de España, «la actividad de las empresas no financieras experimentó un moderado crecimiento en el primer trimestre de 2011, sustentado en gran medida por el fuerte dinamismo de las exportaciones en este período, en un contexto de notable debilidad de la demanda interna».
Casi no se produjo un aumento de los gastos de personal, debido a que el empleo cayó en un 1,1%, y, en este caso, el Banco de España afirma que las remuneraciones medías aumentaron en un 1,2% en el primer trimestre de este año, pero el informe advierte de que «esta evolución contenida de los salarios medios se produjo en un contexto de cierta presión inflacionista, con el consiguiente riesgo de transmisión a los salarios, en la medida en que se activen las cláusulas de salvaguarda, lo que podría traducirse en un avance del coste medio por trabajador».
El Banco de España, por otra parte, considera «importante» que se habiliten mecanismos para incorporar a los jóvenes al mercado laboral, ya que, «de lo contrario, la tasa de paro puede adquirir un carácter estructural, dado que supera el 43,3%».
En su último boletín económico de junio analiza la evolución del empleo en la Unión Europea durante el año 2010. Destaca que la etapa se caracterizó por una «moderación en la destrucción de empleo, un ligero retroceso de la población activa y un marcado descenso en el ritmo de deterioro del número de desempleados, en un contexto de recuperación de la actividad».