La mayoría de los partidos políticos presentes en el Parlamento de Gasteiz tomaron parte ayer en la primera reunión de la ponencia sobre las víctimas de motivación política. Una mesa en la que los diferentes grupos tratarán de llegar a un consenso para reconocer a todas aquellas personas que han sufrido la violencia ejercida por los apartados del Estado español.

Pero no todos los partidos desean reconocer a estas víctimas, invisibles hasta ahora a los ojos de la Administración. Desde las filas del PP y de UPyD tienen claro que para ellos sólo existe un tipo de víctimas, las de ETA.

Según el parlamentario del PP Carlos Urquijo, no se debe equiparar a los muertos a manos de las FSE con los fallecidos en acciones de ETA, ya que «una violencia no es consecuencia de la otra, ni son los dos bandos de un mismo conflicto».

Una explicación a la que se sumó el único parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, que emitió un comunicado en el que calificó esta ponencia de «innecesaria».

Por su parte, el parlamentario jeltzale Iñigo Iturrate, señaló que este tipo de declaraciones, y las efectuadas ayer mismo por el presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, quien apoyó las palabras de Urquijo, son «lamentables».

No piensa lo mismo el portavoz del PSE en la ponencia, Jesús Loza, que trató de exculpar a sus socios recordando que el PP ha aprobado los cinco puntos básicos en relación al reconocimiento y a la reparación de las víctimas de motivación política.

Decisiones

No obstante, la postura del PP y de UPyD no incidió en la conformación de la ponencia, que tras veinte minutos de reunión anunció sus dos primeros acuerdos. Por un lado, la petición a los servicios de la Cámara de toda aquella información relacionada con el tema a tratar en la mesa; y, por otro, la celebración de una nueva reunión.

En la cita del próximo 26 de julio, se adoptará un calendario de trabajo de cara a septiembre y se detallarán las futuras comparecencias.