El único preso político vasco que se encuentra en Portugal, Andoni Zengotitabengoa, inició el 2 de julio su tercera huelga de hambre desde que está en la prisión de Monsanto, en Lisboa.

Ante esta situación, un centenar de vecinos de Elorrio, su pueblo natal, se acercaron el pasado sábado hasta la citada cárcel para expresarle su solidaridad y denunciar «las condiciones de vida bochornosas» que padece.

Sus vecinos hicieron una concentración a las puertas de la cárcel, durante la que se pudieron escuchar gritos a favor del preso político vasco. La movilización duró alrededor de tres horas. Antes de regresar hacia Euskal Herria, este grupo solidario entregó una carta dirigida al director del centro penitenciario para que ponga fin a la difícil situación que vive Zengotitabengoa.

Después de dejar la cárcel, decidieron poner rumbo al centro de Lisboa. Allí desplegaron pancartas informando del estado en el que se encuentra el vecino de Elorrio y estuvieron repartiendo folletos.

Posteriormente, denunciaron los malos modos que tuvo para con ellos la Policía mientras se encontraban a las puertas de la prisión y subrayaron que «la solidaridad llega a todas partes».