Una concejala de la localidad valenciana de Manises ha conseguido de una tacada cumplir con su vocación de público aplaudidor de un programa de la basura perfumada en Tele 5, y a la vez pasar a la gloria por mucho más de cinco minutos, ya que la foto y el vídeo haciendo de decorado trasero de Kiko Matamoros se ha encaramado en todos los medios de comunicación y su nombre, Noemí Martínez, va a ser utilizado como ejemplo de lo que es el compromiso político de un electo por el PP, abandonar un pleno, para asistir de público en «Sálvame de Luxe», que no deberíamos considerarlo como un paradigma, pero que nos viene a recordar el tirón que tiene la televisión y una concejala, séptima teniente de alcalde, no está exenta de esa necesidad de estar muy cerca de los monstruos que viven en nuestro plasma o pantalla led, que están de moda.

Cuando señalamos el número de telespectadores que han seguido un programa, eso que llamamos audiencia, estamos hablando de tres, cuatro o seis millones de individuos, de todas, o casi todas las clases socales, con un nivel de formación medio considerado dentro de los parámetros de todas las medias, y por lo tanto, estos datos que tan bien conocen los programadores y los publicistas, se debe visualizar alguna vez en este tipo de suceso en el que la estadística se hace carne, con vestido verde y melena azabache, en forma de concejala que representa a muchas de esas personas que nunca imaginaríamos que son seguidores fieles de este tipo de televisión que consideramos despectivamente.

Que abandone un pleno por un programa de televisión de estas características es una manera de declaración de principios. Probablemente muchos de sus votantes se considerarán mejor representados por ella. Ha estado cerca de Jorge Javier, de esos seres que copan tantas horas de sus vidas. Su ética, su responsabilidad política, se supone que la tendrá amortizada. Van a hacerse decenas de plenos en los próximos meses de esta legislatura pero esa era una oportunidad única de ir a un plató de televisión a hacer de bulto, algo parecido a su rol en el consistorio, seguramente. Así estamos. Este es el nivel. El tirón de la tele es una adicción insuperable.