El PP afirma que la OPE de Osakidetza «incumple» su acuerdo con López
Los portavoces del PP y de UPyD en la Cámara de Gasteiz criticaron ayer el «excesivo» peso del euskara en la OPE de Osakidetza, una prueba en la que se ha reducido la puntuación otorgada al conocimiento del idioma nacional. Es más, en palabras de la parlamentaria conservadora Laura Garrido, el examen elaborado por Lakua supone un «incumplimiento» del acuerdo de bases firmado entre PP y PSE para que Patxi López fuera designado lehendakari.
GARA
La parlamentaria del PP Laura Garrido y el portavoz de UPyD en la Cámara de Gasteiz, Gorka Maneiro, criticaron ayer la «excesiva» valoración del euskara en la última OPE de Osakidetza. Una opinión que contrasta con las denuncias realizadas por los distintos agentes euskaltzales, para quienes la puntuación otorgada al conocimiento del euskara -18 puntos sobre 80- es una agresión a los euskaldunes.
Garrido fue la primera en criticar durante la mañana de ayer la valoración del euskara en la citada OPE. En una rueda de prensa ofrecida en Gasteiz, afirmó que la puntuación otorgada al conocimiento del euskara supone un incumplimiento del acuerdo de bases alcanzado hace dos años por PP y PSE. Ese acuerdo posibilitó, junto a la ilegalización de la izquierda abertzale, la llegada de Patxi López a Ajuria Enea.
Por ello, la parlamentaria conservadora anunció su intención de poner encima de la mesa dicha cuestión en la próxima reunión de la comisión de seguimiento del acuerdo de bases, ya que, según aseguró, el PSE no ha reducido el peso del euskara en las oposiciones, objetivo pactado entre los dos partidos hace dos años.
Además, para Garrido la puntuación del euskara en las pruebas de acceso a la función pública supone una discriminación con los opositores que desconocen el idioma, que es «lengua cooficial» en el conjunto de la CAV.
Por su parte, Gorka Maneiro señaló que el Ejecutivo de Lakua «no se atreve» a cambiar la política lingüística de los «nacionalistas».
Estas valoraciones, que no disimulan el poco aprecio de PP y UPyD hacia el idioma nacional de Euskal Herria, son el contrapunto a las realizadas en los últimos días por los sindicatos abertzales y los agentes sociales euskaltzales, para quienes la puntuación otorgada al conocimiento del euskara supone una agresión a los derechos lingüísticos de las ciudadanas y ciudadanos euskaldunes. Estas críticas se vienen sucediendo desde el pasado miércoles, ya que diferentes formaciones políticas y sindicales denunciaron que la prueba es «insuficiente» en lo laboral y «agresiva» con el euskara. Para Kontseilua y Behatokia, por ejemplo, muestra retrocesos «inaceptables».
El 20-N, sin UPN
Ésta es la primera vez que el PP habla directamente de «incumplimiento» del pacto que le mantiene como «socio preferente» del Ejecutivo de Lakua. Hasta ahora ambos partidos han insistido en valorar muy positivamente su acuerdo y en reiterar que está «blindado» a cualquier factor «externo», como la confrontación política entre PSOE y PP en el Estado.
Donde el PP sí marca distancias con sus antiguos socios es en Nafarroa. Ayer, Santiago Cervera descartó un posible acuerdo con UPN de cara a las elecciones del 20 de noviembre ya que, como recordó, el partido de Yolanda Barcina «ha marcado su camino con el PSN».
El alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, advirtió ayer a su partido, el PP, de que se opondrá a la prórroga del funcionamiento de Garoña «con todas sus consecuencias». En una entrevista concedida a Radio Euskadi y recogida por Europa Press, el primer edil de la capital alavesa exigió el cierre de la planta «lo antes posible».
De este modo respondió Maroto al presidente del PP en Burgos, César Rico, que el lunes aseguró que la formación conservadora incluirá en su programa electoral la continuidad de Garoña siempre que sea viable técnicamente y la prórroga cuente con el visto bueno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).
Durante la entrevista, el alcalde de Gasteiz subrayó que «en ocasiones» dice «cosas que no cuadran» con la postura oficial del PP. «Si esta situación se produce, habrá que tener mucha mano izquierda y tratar de negociar esas cuestiones», añadió.
Maroto reafirmó su rechazo a la continuidad de la central nuclear burgalesa y destacó que su «posición personal», que defenderá también como alcalde de Gasteiz, «es el no a la central de Garoña con todas las consecuencias».
No fue tan claro el diputado general de Araba, Javier de Andrés, que no quiso pronunciarse sobre la posible continuidad de Garoña al ser requerido para que valorara lo dicho por Maroto. De Andrés, que es secretario general del PP en Araba, recordó que la Diputación no tiene competencias sobre el futuro de la central y alegó que la prórroga de la vida de esta central, la más antigua del Estado, depende del Parlamento español y del CSN. GARA
