Un hombre fue detenido ayer por la mañana en la localidad vizcaína de Zalla, donde se había atrincherado en su vivienda y realizado numerosos disparos con una escopeta de caza hacia el exterior. En el transcurso del incidente, dos ertzainas resultaron alcanzados por impacto de perdigones, aunque sus lesiones son leves.

En un comunicado, la Ertzaintza precisó que tuvo que establecer un dispositivo de seguridad para evitar que algún ve- cino resultara herido. Por su parte, la compañera del detenido y el hijo de la misma, de diez años de edad, pudieron abandonar el inmueble, ilesos, al comienzo del incidente.

Hacia las 5.00 de la madrugada la Ertzaintza recibió varias llamadas de particulares, vecinos del barrio Aretxaga, que informaban de que un varón estaba realizando disparos con una escopeta en el interior de su propio domicilio.

Tras acercarse las patrullas al lugar, comprobaron que la persona, un varón de 47 años, al parecer con sus facultades alteradas, continuaba realizando disparos también hacia el exterior, por lo que procedieron a acordonar los accesos al lugar y a alertar a los vecinos para que no salieran ni se asomaran.

Interior indicó que la gravedad de la situación obligó a movilizar al Grupo Operativo de Intervención de la Ertzaintza, especializado en la resolución de este tipo de incidentes. Hacia las 9.00, varios agentes de este grupo consiguieron detener a la persona, que finalmente se entregaba sin oponer resistencia.

Dos agentes resultaron afectados por impacto de perdigones en la cabeza y en la cara, respectivamente, y tuvieron que recibir asistencia sanitaria, aunque su estado no es grave.