A pesar de que el estado de la mar y las condiciones climáticas eran buenas, la jornada de anteayer fue trágica en tres playas vascas.

Hacia las 16.30, cuando la afluencia a la playa era máxima, fue avistado el cuerpo de un varón de 61 años que flotaba a unos 50 metros de la orilla en la playa Ilbarritz de Bidarte. Los servicios de socorro lo rescataban inmediatamente e intentaron, sin éxito, reanimarlo.

Al parecer el bañista se encontraba fuera de la zona vigilada, al pie del castillo. Tras encontrar sus enseres, fue identificado como un vecino de Mont-de-Marsan (Landas).

Esta misma playa fue escenario de otro accidente en mayo pasado cuando un biarrota de 55 años se ahogó.

Sólo una hora más tarde, en la cercana playa de Uhabia y en circunstancias similares, otro cuerpo era recuperado por los socorristas. Esta vez se trataba de un hombre de unos 30 años que flotaba fuera de la zona de baño vigilado.

No obstante, en ambos casos no se puede afirmar que los ahogados estuviesen bañándose fuera de la zona reglamentada, ya que los cuerpos podrían haber derivado hacia el exterior de las mismas. Las autopsias que se realizarán en los próximos días podrían dilucidar las causas de estas dos muertes.

En mayo pasado un biarrota de 55 años también se ahogó en la playa de Ilbarritz.

Joven donostiarra

Al atardecer del mismo jueves, los buzos de la Cruz Roja hallaron, a unos seis metros de profundidad, el cuerpo sin vida de una adolescente donostiarra en aguas de La Concha.

Fueron sus amigos quienes dieron la alerta hacia las 20.30 al ver que no volvía en el grupo que retornaba del gabarrón cercano al Náutico.

Con esta joven, de 14 años, son ya cuatro las personas ahogadas en los dos últimos meses en playas guipuzcoanas. El primer caso tuvo lugar en Zarautz el 28 de mayo. Dos semanas más tarde, el 11 de junio, el cuerpo de un joven polaco era rescatado en La Zurriola y, a los quince días, otro varón de 27 años se ahogó en la misma playa donostiarra.