Yinguck Shinawatra, hija de una acaudalada familia, se convirtió ayer en la primera mujer en ocupar la Jefatura del Gobierno en Tailandia, un país fracturado y acechado por los militares y donde la estructura social otorga al hombre un estatus superior.

La primera ministra, hermana menor del gobernante depuesto en 2006 por los generales, Thaksin Shinawatra, ganó las elecciones el 3 de junio al frente de su partido Puea Thai tras una meteórica carrera política, y ayer logró el respaldo de 296 diputados mientras que 197 votaron en contra de la única candidata propuesta por los partidos representados en la Cámara.

Su primer reto, pese a su inexperiencia política, será lograr la estabilidad para su país, inmerso en una crisis política desde 2006, y hacer frente a la carestía de la vida.