BALONMANO División de Honor femenina
Itxako aspira al máximo, Bera Bera quiere mejorar, y Kukullaga resistir
La Liga sufre las consecuencias de la crisis económica, con clubes que renuncian a sus plazas, otros que salen con unos presupuestos modestísimos, y una pérdida generalizada de nivel. Bera Bera tratará de aprovecharlo para subir un escalón, e Itxako mirará a Europa.
Juan Carlos ELORZA | DONOSTIA
Esta tarde comienza la Liga en la División de Honor Femenina y, sin temor a equivocarme, la ganará Itxako. De hecho, ese es el único peligro de entidad que se encontrará en la competición, su manifiesta superioridad.
La pasada temporada finalizó con 25 victorias en 26 jornadas, y la única derrota la sufrió en la pista del Ro'casa canario, que al final descendió, aunque posteriormente recuperó su plaza en un intercambio con el Vicar Goya. El domingo pasado se jugaba la Supercopa, primer partido oficial, con el enfrentamiento entre los dos equipos teóricamente más fuertes de la Liga. El Elda además jugaba en casa, y la paliza fue de escándalo: 16-31.
Con estos antecedentes, el equipo representante del viejo Reino ha demostrado que su reino no está en esta Liga, sino en Europa. Ni siquiera cabe pensar en relajaciones ni malentendidos complejos de superioridad en la Liga doméstica. El club de Lizarra ha demostrado una organización impecable, desde sus más altas instancias hasta la pista, donde Ambros Martín se encargará de mantener la tensión de la plantilla cada partido de la temporada, aunque las jugadoras que capitanea Andrea Barnó muestran tal ansia competitiva que a veces parece que lo más oportuno es frenarlas.
El equipo del año pasado era muy bueno, y el que empieza hoy la Liga es mejor. Por sí mismo, este hecho no garantiza nada, pero la competición al máximo nivel exige un cuidado exquisito de los detalles. Hace un año el máximo título europeo era un sueño e Itxako un aspirante cualificado, uno más. Ahora es uno de los favoritos. Ser campeón no es una obligación que se pueda exigir, pero el equipo se ha reforzado para ello, y lo ha hecho muy bien.
El bloque del equipo es prácticamente el mismo. Las más jóvenes han ganado en experiencia -un punto a favor-, y las más veteranas tratarán de mantener su nivel, o de camuflar los aspectos negativos que empiezan a sentirse a partir de cierta edad. Sabrán cómo hacerlo, porque el premio al que aspiran justifica cualquier esfuerzo, y no siempre puedes acceder a él.
Con los cambios de Stefani por Milenkovic en la portería, y el de Turey por Zebic en el extremo izquierdo, bastaría con mantener las prestaciones de la pasada campaña. Donde las mejoras son notables es en las llegadas de Zulai Agirre y Deonise Fachinello. En el caso de la brasileña, la decepcionante temporada de Oana Soit ha llevado a Itxako a apostar por una jugadora conocida, con mejores prestaciones defensivas.
Itxako no contará con ninguna primera línea zurda para su ataque, pero explotará la capacidad de penetración de sus diestras, y sus excelentes extremos zurdas podrán beneficiarse de los espacios que se generarán en las circulaciones con jugadoras diestras en el juego de ataque.
Zulai Agirre aporta algo que faltaba en la plantilla del año pasado, un complemento de nivel para Begoña Fernández en el puesto de pivote. La desaparición de Natalia Kurbanova en las citas más decisivas de la Champions lastraba al equipo, porque Begoña Fernández tenía que multiplicarse en labores defensivas y ofensivas, en detrimento de una frescura física y mental crucial en momentos determinados. La bermeotarra apuntalará un puesto clave, aportará defensa y goles, y permitirá a Ambros Martín repartir minutos de calidad entre ambas. La única duda que puede caber es la adaptación de Agirre, titular indiscutible en Donostia, a su nuevo rol, pero todo lo que está en juego ayudará en esa tarea.
Bera Bera afronta su segunda temporada tras la retirada de Tati Garmendia con el objetivo de afianzar un nuevo estilo de juego que le permita conjugar las cualidades de su actual plantilla con la personalidad forjada en la larga trayectoria del club.
La pasada campaña no fue completamente satisfactoria para su entrenadora, Reyes Karrere. Se cumplió el objetivo de clasificarse de nuevo para jugar en Europa -el año anterior se había quedado fuera, por primera vez en la última década-, pero la cantidad de goles encajados complicaba aspirar a mayores metas. Las donostiarras marcaban goles, en su línea habitual -cuartas en esa estadística-, pero en el cómputo global encajaban casi tantos como sumaban -734 por 714-, en la línea de los equipos más flojos de la Liga.
Karrere sacó sus conclusiones y los retoques de la plantilla de esta temporada han ido en esa dirección: manteniendo el nivel anotador, y logrando proteger con mayor eficacia su portería, se pueden sacar mayores réditos en forma de puntos. Sobre todo en los partidos de fuera de casa. La llegada de dos nuevas porteras de nivel físico y técnico sobresaliente, como la brasileña Darly Zoqby y la canaria Yamiley Rodríguez, apunta en esa dirección. El regreso de Eli Pinedo tras su periplo por varios clubes también ayudará a apuntalar las labores defensivas, y el último fichaje del equipo, la pivote argentina Antonella Mena -que llega para cubrir el hueco de la marcha de Zulai Agirre a Itxako-, también parece reunir características idóneas para colaborar en las tareas defensivas.
Buena parte del trabajo de pretemporada de Bera Bera se ha enfocado en esa dirección, y los resultados empezarán a verse a partir de hoy mismo, y en la primera cita europea de la Copa EHF frente al DHW Antwerpen belga, cuyos dos partidos se disputarán en Donostia.
Bera Bera contará con un equipo equilibrado y completo, con dos jugadoras solventes por puesto, un muro defensivo central con centímetros y kilos, que si consigue una buena colaboración defensiva con sus porteras puede facilitar ese juego de contraataque tan del gusto de cualquier entrenador, pues proporciona un máximo de eficacia con un mínimo de esfuerzo ofensivo. Si todo encaja, Bera Bera podría dar un paso adelante en la Liga, aspirar a volver a entrar entre los primeros, competir en la Copa que tan bien se le ha dado en los últimos tiempos, y llegar lejos en Europa.
Otro elemento que puede jugar a su favor es el declive económico que han sufrido casi todos los equipos de la categoría. De hecho ha sido un verano con mucho movimiento. Tras los descensos directos de Marina Park y Ro'Casa otros dos equipos, Monovar y Vicar Goya, renunciaban a sus plazas. Algunas voces solicitaron que se aprovechara la ocasión para reducir la categoría a 12 clubes, pero finalmente Ro´casa recuperaba su plaza y ascendían tres equipos (Gijón, Porriño y Kukullaga).
En la parte alta de la tabla las cosas tampoco van mucho mejor en lo económico. De hecho, sólo Itxako y Bera Bera consiguen mantener las condiciones de sus contratos profesionales con las jugadoras, mientras el resto vuelve a la ley de la selva, lo que ha mermado su potencial y les ha impedido reforzar sus plantillas. En ese contexto, Bera Bera puede afianzarse y aspirar a mayores cotas deportivas.
Kukullaga es un club de larga tradición en el balonmano femenino vizcaino, con casi 30 años de vida, centrado en el barrio San Antonio de Etxebarri, cuyos equipos de cantera han sido fijos en la Liga Vasca desde sus inicios. Fruto de esa labor, en 1991 logró que su equipo senior ascendiera a Primera División, donde se había mantenido de forma ininterrumpida desde entonces.
La pasada temporada su buena trayectoria liguera les animó a organizar la fase de ascenso junto al Lleida. Dividida en dos fines de semana, el primero se jugó en cancha catalana y Kukullaga perdió allí casi todas sus opciones. El segundo fin de semana, en Etxebarri ante su público, el equipo reaccionó, pero no bastó para subir. La decepción fue grande, pero unas semanas después, a mediados de julio, se les presentó la oportunidad que buscaban: el Monovar Alicante renunciaba a su plaza por motivos económicos, y la Federación Española se la ofrecía al Kukullaga de Etxebarri.
La decisión no fue fácil, porque el club ya se había organizado para seguir un año más en Primera. Plantilla, presupuesto, viajes... Pero la ilusión pudo más, y aceptaron. A partir de entonces han vivido un verano loco, en el que han logrado los apoyos imprescindibles, aunque será el club de menor presupuesto de la categoría. Su objetivo, que no es pequeño, es mantenerse. Y lucharán por ello. J.C.E.
Bera Bera y Kukullaga se enfrentan esta tarde en Bidebieta (19.00). Las vizcainas pretenden hacerse fuertes en su cancha, donde el pasado domingo tutearon por momentos a las donostiarras en la Copa de Euskadi. Hoy debutan en partido oficial, en una pista muy difícil.
Itxako visita la cancha del FEVE Gijón, que se ha rejuvenecido en su vuelta a la máxima categoría tras un año en la División de Plata, con algunas promesas del balonmano español. La portera rumana Ane Mirca y la veterana Vanessa Lozano serán las líderes del equipo.
La competición liguera disputará nueve jornadas hasta el 15 de noviembre, y a partir de ahí se parará con motivo de la disputa de la fase final del Mundial en Brasil -para la que está clasificada España- que se celebrará del 2 al 18 de diciembre. La Liga se reanudará el 7 de enero.