EEUU aviva el miedo a un ataque de Al Qaeda ante el aniversario del 11-S
En vísperas del aniversario del 11-S, EEUU ha avivado el miedo a la amenaza de un atentado al difundir «una alarma antiterrorista creíble» que la secretaria de Estado, Hillary Clinton, atribuyó a Al Qaeda. Washington y Nueva York vivieron un gran despliegue policial.GARA |
Estados Unidos se prepara para el décimo aniversario de los atentados del 11S con la seguridad reforzada por un visible despliegue de policías en la capital y en Nueva York, tras la «alerta antiterrorista» dada por las autoridades federales.
Los responsables de seguridad pidieron la colaboración ciudadana y recomendaron cautela ante lo que consideran una amenaza «creíble», aunque «no confirmada», de atentado en las próximas horas en EEUU.
Según las autoridades estadounidenses, la información proviene de conversaciones telefónicas interceptadas en las que supuestamente un activista de Al Qaeda en Pakistán habla sobre supuestos ataques contra Nueva York y Washington, según la cadena CNN.
La policía siguió la pista de tres individuos que pudieron haber entrado en EEUU el mes pasado con la supuesta intención de cometer algún ataque suicida con coche-bomba o con un camión.
El jueves se declaró el estado de emergencia policial. El incremento de la presencia policial estará respaldado por el FBI.
En las calles de Nueva York también se han instalado varios controles, uno de ellos a pocos metros de la sede de la ONU.
El aumento de las medidas de seguridad también afecta a los aeropuertos, donde han aumentado aún más las revisiones de los equipajes de los pasajeros, terminales de autobuses y de trenes.
Clinton señala a Al Qaeda
«No tomamos esta amenaza a la ligera. Nos la tomamos muy en serio, pero estamos preparados», dijo James McJunkin, director adjunto del FBI en Washington. McJunkin dijo a sus agentes que no están buscando a un individuo particular, sino siguiendo pistas y analizando cualquier patrón de comportamiento inusual.
La secretaria de Estado, Hillary Clinton, afirmó que Al Qaeda está detrás de la amenaza. Previamente, el vicepresidente Joe Biden, había declarado que aunque no había un «indicio flagrante» de la amenaza, las autoridades investigan sobre un posible coche bomba. Clinton afirmó que la amenaza recuerda la necesidad de «mejorar constantemente la estrategia contra el terrorismo». Pero esta estrategia ha suscitado no pocas críticas de organizaciones de derechos humanos. La principal de ellas en el país, la Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU), denunció ayer que EEUU ha «sacrificado sus valores fundamentales» en nombre de la seguridad desde los atentados del 11 de setiembre de 2001. «El sacrificio de los valores de Estados Unidos, como la justicia, la libertad individual y el Estado de derecho, en última instancia lo que hace es socavar la seguridad del país», afirma la organización en el informe «Un llamamiento al coraje: reclamando nuestras libertades diez años después del 11 de Setiembre». Estos «elementos definidores de nuestra identidad nacional se han visto amenazados por la política del miedo patrocinada por nuestros dirigentes», denunció. El informe hace un repaso de la «política de torturas» llevada a cabo por el Gobierno de George W. Bush, y advierte de que la impunidad de que disfrutan sus responsables «deja abiertas las puertas a futuros abusos». En el mismo sentido, la organización Human Rights Watch afirmó que el décimo aniversario del 11-S es una ocasión para recordar a las cerca de 3.000 víctimas de los atentados pero también la reacción en forma de comisiones militares, centros secretos de la CIA, torturas o entregas extraordinarias para torturas encubiertas, abusos que «probablemente han servido de impulso para nuevos atentados terroristas».
Al menos 236.500 personas, la mayoría de ellas civiles, han muerto en incidentes directamente relacionados con la «guerra contra el terrorismo» iniciada por EEUU en respuesta a los atentados, que ha causado además un incremento de la deuda nacional en al menos 2,7 billones de euros, según el estudio del Instituto Watson para Estudios Internacionales.