Mientras los mercados asedian al país, los juicios acorralan al primer ministro italiano. Silvio Berlusconi. El fiscal de Milán, Maurizio Romanelli, ha enviado a juicio de forma oficial al primer ministro por el llamado «caso Unipol», en el que está acusado como cómplice en la revelación de secretos de oficio por la compra irregular de la Banca Nacional de Italia por la empresa Unipol, al publicar escuchas ilegales en el diario 'Il Giornale', propiedad de su hermano Paolo. Según alegó la juez, estas escuchas telefónicas favorecieron a Berlusconi en las elecciones de 2006. Con este caso, Berlusconi suma un total de cinco procesos abiertos en su contra, dos por fraude fiscal en los casos Mediaset y Mediatrade, otro por prostitución de menores y abuso de poder en el «caso Ruby» y otro por sobornar al abogado David Mills para que declarara a su favor en un juicio, en el llamado «caso Mills».

Además, la Fiscalía de Bari investiga otro caso contra el empresario Giampaolo Tarantini, al que se le imputa haber conseguido al menos 30 mujeres para que se prostituyeran con el primer ministro.