Las fuerzas leales al presidente sirio, Bashar Al Assad, recuperaron el control de la mayor parte de la ciudad de Rastán después de cinco días de lucha contra los desertores del Ejército y rebeldes, según el director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, Rami Abdel Rahman.

Abdel Rahman explicó que las fuerzas del Ejército se encuentran desplegadas en el 80% de la ciudad después de que el viernes fueran enviados a la región 250 tanques. Añadió que un residente que logró escapar informó de la situación, detallando los intensos tiroteos que se produjeron durante la noche. La situación de Rastán muestra que la resistencia al régimen sirio también es armada.

Precisamente el líder militar disidente, el coronel Rial al Asaad, ha cifrado en más de 10.000 los soldados sirios desertores que están combatiendo contra las fuerzas de seguridad de Damasco. Este alto cargo militar, que lidera el denominado Ejército para la Libertad Siria declaró a Reuters que estas células de disidencia están focalizando su ataques en las unidades de las fuerzas aéreas y de Inteligencia, así como contra policías de incógnito que tratan de evitar motines en el seno del Ejército. El coronel Al Asaad pidió apoyo internacional para los rebeldes y aseguró que la meta del Ejército para la Libertad Siria es «proteger a los manifestantes pacíficos y derrocar al régimen».

Ayer la represión de las protestas contra Al Assad dejó al menos once muertos según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, tras las 19 personas muertas el viernes, entre ellas seis militares.

En este contexto, la oposición prosigue su organización en torno al Consejo Nacional sirio creado a imagen y semejanza del libio, si bien, en este caso, la mayor parte de su base se encuentra en el exterior de Siria.