Estreno liguero con triunfo del Caja Laboral Baskonia
Los bajitos de Ivanovic se hacen grandes en el Iradier Arena
Pau Ribas y Brad Oleson, con la colaboración de Teletovic, supieron atinar con la canasta rival en la segunda mitad, para doblegar a un Cajasol muy incómodo que sobrevivió gracias a los rebotes de ataque. El duelo fue muy gris e irregular, sobre todo en la primera mitad.
CAJA LABORAL BASKONIA 73
CAJASOL 60
Arnaitz GORRITI
Brad Oleson y Pau Ribas lo han pasado mal en sus dos anteriores campañas. Una lesión mal curada de tobillo y una timidez extrema han limitado al escolta hispano-alaskeño, mientras que el ex capitán del Joventut ha sufrido en su indefinición posicional, y no se ha podido liberar de ese yugo hasta que se ha decantado a jugar de escolta a tiempo completo.
La primera victoria del Caja Laboral Baskonia en esta Liga ACB Endesa 2011/12 llegó de su aportación. Sobre todo a partir del descanso, el dúo de escoltas, que compartió un buen montón de minutos, con Heurtel o Prigioni ejerciendo de bases, lideró el triunfo gasteiztarra ante un Cajasol que sólo dobló la rodilla en los últimos minutos. Por supuesto, la aportación anotadora de Teletovic también fue muy destacable, amén de varios momentos de Seraphin, que marcó territorio con su intimidación.
Hay que reconocer que todavía están lejos los engranajes de funcionar a pleno rendimiento. Los jugadores de ambos equipos se estorbaron en más de una ocasión, sobre todo a la hora de pisarse los espacios -la famosa falta de automatismos de la que tanto habla Dusko Ivanovic- y a la hora de cambiar de asignación defensiva de forma automática. No obstante, se empezaron a ver algunas pinceladas de buen o al menos esperanzador juego, todo ello dentro del contexto de un partido espeso.
El Caja Laboral Baskonia volvió a abusar del tiro de tres y a sufrir para cerrar el rebote defensivo ante un Cajasol que compensó su mediocre porcentual en el tiro a base de rechaces ofensivos y tiros libres, merced a las faltas con las que fue cargando principalmente a los ala-pívots -Milko y Nemanja Bjelica- baskonistas.
Con la iniciativa, pero a tirones
Merced al buen arranque de Teletovic y Oleson, los de Ivanovic cobraron rápidas ventajas, pero la lacra del rebote en ataque hizo que el cuadro hispalense no tardara en igualar el marcador, una tónica que se vino repitiendo en el transcurso de la primera mitad.
El juego de ataque gasteiztarra presentaba mayor fluidez que el de su rival, compensando la tara bajo el tablero con un buen juego de penetraciones y balones doblados o pases extra castigados con bonitas canastas. Con todo, en un partido trabado, de ésos de los que le gustan a Joan Plaza, que ató muy en corto a Prigioni y San Emeterio, el duelo permanecía en tablas al descanso: 32-32.
El estirón baskonista se produjo después del receso. Ivanovic acertó de pleno al hacer coincidir a Oleson y Ribas, y aunque todavía sufría bajo el aro, su equipo empezó a aumentar la ventaja frente a un Cajasol que echó de menos tener a algún buen tirador de tres. Aparte del dúo de escoltas, Seraphin y San Emeterio, con el inevitable Teletovic, se unieron a la fiesta para, a pesar de la tremenda irregularidad en el juego, hacer que el primer triunfo subiera al casillero gasteiztarra.
Todavía hay mucho margen de mejora, pero el cuadro baskonista mostraba ayer que tiene recursos de sobra para ganar, incluso cuando su juego está lejos de su mejor nivel.
Dusko Ivanovic reconoció que «el primer partido es un poquito más difícil». Pero no perdió su habitual autocrítica, donde el rebote ofensivo fue de nuevo, «como el año pasado», el gran caballo de batalla. «Hemos tenido paciencia y sabido esperar nuestro momento, para lograr la victoria».
«Esperemos que el problema de los rebotes sea por tratarse del primer partido, porque, por ejemplo, Jasen agarró 5 rebotes en ataque, y aunque él sea más grande, el rebote no es una cuestión de uno contra uno».
Sobre los pocos minutos de Williams, que apenas jugó tres minutos, el técnico montenegrino lo achacó a que «necesita tiempo, después de que haya estado lesionado casi hasta ahora».
Por otro lado, alabó los «recursos» de su equipo, a la hora de contestar acerca de los interesantes minutos de Heurtel o del dúo Oleson y Ribas. Sin embargo, el de Bijelo Polje, leal a su estilo, no dejó pasar la oportunidad para incidir que «el equipo aún necesita mucho trabajo para dar su mejor nivel. Todos deben subir en aportación».
Por su parte, el técnico del Cajasol, Joan Plaza, achacó la derrota de los suyos a los «excesivos errores continuados», cometidos sobre todo en el tercer cuarto, después de haber «sabido mantenerse y dejar al Baskonia en menos de 20 puntos en los dos primeros cuartos, a pesar de que no hayamos metido muchos tiros libres y no hayamos logrado correr. Para ganar a un equipo como el Caja Laboral Baskonia hay que minimizar los errores, y a veces ni así es posible lograrlo», reconoció. A. G.