Los seis aspirantes del Partido Socialista (PS) francés a concurrir como candidato a las elecciones presidenciales previstas para abril y mayo de 2012 se enfrentan hoy en la primera vuelta de unas primarias abiertas por primera vez a toda la ciudadanía y no sólo a sus militantes.

El PS, con el principal favorito, François Hollande, a la cabeza, se está aprovechando del impulso político y la transcendencia pública que le está deparando el proceso de primarias y ello se está reflejando en las encuestas que deparan a Hollande una aplastante victoria sobre el actual presidente, Nicolas Sarkozy, si finalmente éste confirma su candidatura.

Declaración de adhesión y euro

La principal novedad de estas primarias es que no están limitadas a los aproximadamente 200.000 militantes del PS como en anteriores citas, ya que cualquier ciudadano inscrito en el censo electoral podrá hacerlo. Eso sí, antes deberá donar un euro en calidad de tasa de participación y tendrá que firmar una declaración de adhesión a los valores de la izquierda.

Incluso desde la derecha se ha reconocido el valor de este proceso de primarias y ya hay voces que no descartan organizar uno similar, no para las elecciones presidenciales de 2012, pero sí para las de 2017.

La mayoría de encuestas dan la victoria a Hollande, con más del 40% de los apoyos, seguido de Martine Aubry, secretaria general del partido, con cerca del 30%. Todas las previsiones apuntan a que el candidato más votado no conseguirá el 50% que le dé una victoria directa, por lo que los dos candidatos más votados se enfrentarán en una segunda vuelta, programada para el 16 de octubre.

En el plano político, sus propuestas sólo tienen ligeras diferencias, por lo que los seis aspirantes -Arnaud Montebourg, Ségolène Royal y el catalán Manuel Valls, además de Hollande y Aubry- han logrado generar un debate vivo sin provocar fracturas internas, gracias sobre todo a una imagen de unidad frente a un desgastado Sarkozy.

Siete urnas en Lapurdi

El objetivo del PS es conseguir que un millón de personas acudan a los cerca de 10.000 puntos de votación que se instalarán en edificios públicos como colegios, ayuntamientos y polideportivos, además de los propios locales del partido, de todo el Estado francés. En Lapurdi se instalarán siete urnas, tres en Baiona y cuatro en Bidaxune, Hiriburu, Urketa y Ahurti.