SEGUNDA B Imparable
Más equipo que revelación
El Amorebieta sigue enlazando campanadas para asentarse en posiciones de play-off.
Amaia U. LASAGABASTER
Recién ascendido y con el presupuesto más bajo del grupo -algo menos de medio millón de euros-, el reparto de etiquetas no ofrecía opción a muchas dudas allá por el mes de agosto: en la primera temporada de su historia en Segunda B, al Amorebieta le tocaba sufrir para mantener la categoría. Y punto.
Y es posible que ese destino se acabe cumpliendo porque la Liga es muy larga y da para muchos altibajos pero, ahora mismo, no parece la posibilidad más factible. Cinco victorias, dos empates y una sola derrota en ocho jornadas han asentado a los hombres de Axier Intxaurraga en los puestos de promoción, de los que no se han movido desde que empezó la Liga. El descenso se sitúa ya a nueve puntos e incluso el quinto clasificado acumula una desventaja de cuatro. No hay duda de que estamos ante el equipo revelación de este campeonato.
Lo de equipo en mayúsculas. Es la palabra que más se escucha en el discurso de cualquiera de sus integrantes. Tanto como que ahí radica «el secreto del éxito», en opinión de Roberto Cuevas. «La clave está en el equipo -insiste-. Nadie sobresale y todo el mundo se implica. Los veteranos aportan veteranía, saber estar, y los jóvenes las ganas. Y todo el mundo se sacrifica sin pensar en cómo puede destacar, sino en contribuir para beneficio del equipo».
Eso ha permitido que el Amorebieta haya sumado 17 puntos en ocho jornadas en las que, además, se ha enfrentado ya a prácticamente la mitad de los teóricos candidatos al play-off. «Y hemos dado la cara contra todos, aunque los resultados -victoria ante el Salamanca, derrota frente a la Ponferradina, empate contra el Mirandés y goleada al Real Unión- no siempre han acompañado», reconoce Cuevas. «Pero sabemos que ésa no es nuestra Liga -asegura el durangarra-, que la temporada es muy larga, que hay baches, que algunos equipos que no han empezado muy bien irán subiendo... Nuestro objetivo sigue siendo la permanencia».
Lo que tampoco quiere decir que los azules se resignen a cumplir con un guión escrito antes de que echase a rodar. «No hay que levantar los pies de la tierra porque suele ser peligroso -advierte Cuevas-, pero de momento estamos ahí. El hacer bien las cosas nos está dando resultados, que a su vez nos dan confianza y tranquilidad a la hora de jugar, con lo que es más sencillo hacerlo bien y conseguir resultados. Aunque no sea definitivo, todo el mundo sabe lo importante que es empezar bien. Nosotros lo hemos hecho y ahora vamos a ir tranquilos, paso a paso, pero sin levantar los pies de la tierra», insiste.
Aunque tampoco quepa hablar de resignación. «De momento estamos ahí. Vamos paso a paso y ya veremos lo que pasa. Pero sin levantar los pies de la tierra porque suele ser lo peligroso», advierte.
Diferentes experiencias
Tentación que le toca evitar a una plantilla en la que destaca la experiencia, aunque no exclusivamente en el sentido habitual. Porque el Amorebieta mantiene buena parte de los jugadores que consiguieron el ascenso la pasada temporada -en el once titular que goleó al Real Unión el sábado, sin ir más lejos, había media docena de jugadores que el pasado año militaba en Tercera-, prácticamente la mitad de la plantilla. La experiencia pasa en su caso por el conocimiento del club.
El de la categoría lo ponen buena parte de los fichajes. Junto al guardameta Aitor, procedente del juvenil, los jugadores cedidos por Athletic y Real, Vitoria y Aldalur, y los hombres que se ha traído Axier Intxaurraga de la Cultu, Odei y Muniozguren, el técnico se ha rodeado de hombres con mucho rodaje en sus piernas y no sólo en la categoría de bronce.
Como el propio Roberto Cuevas, que ha pasado por Segunda A con Eibar -con el que tiene el honor de haber marcado un gol al Real Madrid en partido de Copa- y Alavés. Precisamente el próximo rival de los azules, aunque el vizcaino no sabe aún si podrá jugar, después de que el sábado abandonara retirado el campo con un fuerte golpe en la rodilla izquierda, precisamente en la jugada en la que anotaba el 2-0 para el Amorebieta.
A Mendizorrotza
Cuevas reconoce que se cumple el tópico: el del domingo será un partido especial en lo personal -«pese a que jugué allí el año del descenso, guardo muy buenos recuerdos y la gente siempre se porta muy bien conmigo», asegura- y también en lo colectivo. «Vamos a jugar en un gran campo y contra un gran rival en el momento en el que estamos, con la tranquilidad de los resultados, así que podemos tener la oportunidad de hacer algo muy bueno». Y eso que Cuevas es de los que ve al Alavés bastante más arriba de su posición actual. «Esto es muy largo. Hay varios equipos que han cambiado mucho y todavía se tienen que ir acoplando. Yo creo que al final, los tres candidatos vascos al play-off estarán ahí arriba». Quién sabe si les acompañará el Amorebieta.
La jornada
Goleador. Sendoa volvió a salvar los muebles para el Alavés, al anotar el gol de la victoria en Segovia. Un tanto que, además, encarama al vizcaino a lo más alto de la tabla de realizadores, empatado a cinco dianas con Diego Cervero (Logroñés), Joaqui (Arandina), Pablo Infante (Mirandés) y, tras su hat-trick en Arlonagusia, Mateo (Ponferradina). En el segundo escalón, con cuatro, se mantiene Etxaniz (Sestao River).
Penaltis. Hubo protagonismo para los porteros en la octava jornada, aunque no todos obtuvieron la misma recompensa. En Segovia, Rangel salvó dos puntos para el Alavés al detener un penalti en los últimos minutos. En Guijuelo, Zigor, que se estrenaba en la portería del Eibar, también detuvo la pena máxima lanzada por Iván Mateo, aunque el propio jugador chacinero aprovechó el rechace para marcar. Y en Arlonagusia, Alcalde evitó la manita de la Ponferradina al Lemona, al detener el penalti ejecutado por Yuri.
Calendario. Alavés, Eibar y Lemona afrontan una semana cargadita. Los dos primeros disputan los 1/32 de final de Copa, que mañana llevará a los albiazules a Albacete, mientras los armeros recibirán a la Ponferradina. En caso de victoria, se enfrentarán en la siguiente ronda con uno de los equipos de Primera que disputa competiciones europeas. El Lemona, por su parte, visita mañana Zalla, donde un empate le vale para clasificarse para la siguiente ronda de la Copa Federación, en la que la pasada temporada llegó hasta la final.
Banquillos. Julio Bañuelos se convirtió la semana pasada en el primer técnico destituído de la presente temporada. Desde ayer ocupa su lugar al frente del Burgos Miguel Ángel Álvarez Tomé, que la pasada campaña dirigiera al Alavés.
Concierto. Zuhaitz Gurrutxaga, actualmente en el Lemona, presentará esta noche el primer disco de su banda «Vanpopel». El elgoibartarra y sus compañeros tocarán las canciones de su primer álbum, titulado «Con celos y señales», en el Kafe Antzokia de Donostia a partir de las 22.00.
Si algo está caracterizando la trayectoria del Amorebieta es su seguridad defensiva. Con apenas tres goles encajados, Igor Etxebarrieta -que llegaba este verano al club, procedente del Barakaldo-, y gracias a que Carlos Pouso ha alternado a sus dos guardametas en la portería del Mirandés, lidera el Trofeo Zamora del grupo.
El equipo azul ha acabado cinco de los ocho encuentros que ha disputado con la cerradura de su portería inmaculada, lo que le ha permitido rentabilizar al máximo sus goles. Hasta la goleada del sábado al Real Unión, apenas había anotado cinco, que le habían reportado nada menos que 14 puntos; una rentabilidad mayor aún que la del líder.
Una situación bien diferente a la que viven algunos de los teóricos candidatos al play-off. El Alavés, sin ir más lejos, ha tenido que esperar hasta la octava jornada para completar un partido sin encajar un solo gol. Algo que el Eibar también ha conseguido en una sola ocasión y el Real Unión en apenas dos. Los tres se sitúan, de hecho, entre los equipos más goleados del grupo, lo que explica en parte su irregular trayectoria. A.U.L.