La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha multado con siete millones de euros a varias organizaciones de transportistas a las que considera responsables de haber montado un «cártel» para controlar el transporte de mercancías por carretera en el puerto de Bilbo. Representantes de los transportistas rehusaron ayer valorar la situación hasta analizarla detalladamente con sus abogados.

Según la resolución de la CNC, mediante este sistema los transportistas «se repartían los clientes, fijaban los precios en función de las distancias y el tipo de carga y controlaban y vigilaban el cumplimiento de los acuerdos».

Las organizaciones multadas son el Sindicato de Transportistas Autónomos de Bizkaia (Sintrabi), con 4.608.162 euros, y las sociedades Bidetrans S.L. (1.436.857 euros), C.B. Bilbao S.L. (1.034.107 euros) y Transmeta S.L. (332.966 euros).

Largo proceso

Esta multa es el resultado de un largo proceso que se remonta al año 2001 y tiene su origen en las denuncias formuladas durante años por diferentes instituciones.

Las investigaciones realizadas por el CNC han llevado a la conclusión que «desde 2002 y al menos hasta 2006, la operativa de funcionamiento en lo referente al transporte de mercancías por carretera en el Puerto de Bilbao, y al menos para distancias inferiores a 200 kilómetros, estaba controlada por Sintrabi, contando para ello con la colaboración de una serie de empresas con base operativa en el puerto».

Existía también, según la CNC, un articulado mecanismo de «presión y retorsión para hacer cumplir dichos acuerdos, que era ejecutado y financiado por los propios participantes del cártel mediante la creación de la figura de los `vigilantes'».

A juicio de la CNC, estas conductas van en perjuicio de «la competitividad de miles de empresas», de «todos los consumidores» y en beneficio de unas pocas personas.