El rector de la UPNA, Julio Lafuente, acudió ayer a la Cámara de Iruñea para dar explicaciones sobre los efectos de los recortes de 4 millones de euros en 2011 y las consecuencias que tendrá en 2012 en pleno proceso de adaptación a Bolonia, del que dijo «exige más recursos». El máximo responsable de la universidad pública advirtió de que Nafarroa «no puede descolgarse del tren del conocimiento».

Lafuente indicó que el recorte de gastos decidido por el Gobierno ha sido en el caso de la UPNA «muy importante», ya que esos 4 millones que dejarán de recibir este año suponen más del 50% del ajuste realizado en el Departamento de Educación, que rebaja sus gastos en un 1,2% mientras que bajan en un 6,5% las transferencias que este campus recibe del Ejecutivo.

Esta menor financiación tendrá como consecuencias, entre otras, que se recorte parte de lo destinado a grupos de investigación y becas y se paralicen mejoras en la red informática.

Además, en 2012, mientras se debe cumplir con el Espacio Europeo de Educación Superior, lo que aumenta gastos de personal, la UPNA deberá mantener «sacrificios y ajustes» porque de nuevo el Ejecutivo navarro prevé una financiación inferior en 900.000 euros a la que se le planteó como necesaria, en total 59,9 millones.

Esta menor aportación conllevará de nuevo el próximo año un descenso en becas para estudiantes y futuros profesores; una caída del 23% en las inversiones, incluidos contratos de biblioteca, equipamiento docente como el campus de Tutera y libros; una reducción del 6% en gastos corrientes; y un incremento del 13,7% de la financiación aportada por la UPNA a través de su propio remanente.