La historia del cine muestra una amplia variedad de películas que en el momento de su estreno fueron prohibidas o censuradas por considerarlas nocivas para la sociedad. «Tras el cristal» (Agustí Villaronga, 1987), «La naranja mecánica» (Stanley Kubrick, 1971), «Holocausto caníbal» (Ruggero Deodato, 1980) o «A Serbian Film» (Srdjan Spasojeviç, 2010) son un pequeño ejemplo de ello.

Un año después de la prohibición de su exhibición de este último film en la Semana de Cine Fantástico y de Terror de Donostia, ayer se presentó «Ven y mira. El cine fantástico y de terror en la zona prohibida», un libro que pretende «historiar, contextualizar, analizar y gestionar un cine que ofrece la posibilidad y el reto de posarse sobre lo impensable o lo insoportable».

«El libro nace de una ofensa que sufrimos 500 adultos a los que no nos permitieron ver `A Serbian Film'», explicó su coordinador Rubén Lardín. «La impotencia que nos causó nos ha llevado a escribirlo», añadió. Así, todos los textos están escritos airadamente y «en caliente». Pero, aun así, Lardín aclaró que está lleno de humor y que pretende ser «un canto a la libertad. Pedimos libertad para opinar, para ver».

Acompañando a Lardín en la presentación, estuvo Jesús Palacios, quien colabora en el libro con dos textos. Uno de ellos es una breve historia de la censura en la literatura, donde cuenta que la censura que se practicaba durante la dictadura de Franco, ahora los autores lo tienen «interiorizado», siendo ellos mismos los que no se permiten tratar ciertos temas.

El otro texto de Palacios trata el tema de la pedofilia, intentado incidir en la idea de que «el pensamiento no es un delito. La literatura, por mucho que nos pueda molestar, es literatura. Y el cine, es cine». Así, analiza la polémica escena de «A Serbian Film», y al final del texto, ofrece un listado de películas que tratan la sexualidad infantil de una manera perversa que se pueden alquilar en videoclubs.

El libro ha sido coordinado por Rubén Lardín y en él participan Daniel Ausente, Jorge de Cascante, Jordi Costa, Rubén Lardín, Jesús Palacios, Joan Ripollés Iranzo, Nelson de la Rosa y Frank G. Rubio.

Imágenes góticas y gore

Por otro lado, también se presentaron las séptimas jornadas del Cómic, «Euskadi Fantastikoa», que en esta edición acoge dos exposiciones, de Rober Garay y Arantza Sestayo. Las dos exposiciones llevan como título «La bella y la bestia», aunque se refiera a las cualidades físicas de sus autores. La organización de la Semana ha querido diferenciar entre las bellezas retratadas en las imágenes de Sestayo y el «garrulismo» de los «grotescos» personajes de Garay.

«Procuramos que los dos autores tengan relación entre ellos, pero este año no tienen nada que ver», explicó Iñaki G. Holgado, comisario de la exposición. Sestayo se dedica a la ilustración y usa acuarelas, óleos e imágenes góticas. «Es una pintura que parecen cuadros clásicos por la técnica usada, pero con temas actuales», dijo Sestayo.

Sin embargo, Garay se dedica a todo tipo de proyectos. «Rober es polifacético. Es un artista tan amplio que nos hemos centrado en lo relacionado con la Semana», explicó Holgado. «He procurado traer lo más horroroso. Esta exposición puede ser el distintivo del pérfido travieso que llevo dentro», bromeó Garay.

La muestra de Sestayo se encuentra en la Biblioteca Central de Donostia desde el pasado sábado y hasta el próximo día 12. Mientras que la de Garay está ubicada en los cines Príncipe hasta el 4 de diciembre.