La dirección de la siderúrgica Nervacero, ubicada en Trapaga (Bizkaia), anunció ayer que ha alcanzado «preacuerdos» para ofrecer soluciones a los 56 trabajadores afectados por el ERE de extinción de contratos que ha presentado. Está previsto que en los próximos días el Gobierno de Lakua resuelva este ERE impulsado por Nervacero, que en principio afectaba a 73 trabajadores pero que fue rebajado a 56 durante las negociaciones entre la empresa y los sindicatos. Según un comunicado emitido por Nervacero, dichos preacuerdos incluyen «una garantía de reincorporación en función de la recuperación del sector». Esta factoría, cuya plantilla es de unos 400 trabajadores, se dedica a la fabricación de acero corrugado para el sector de la construcción y obra civil.